METEPEC, Méx.- Coordinar la atención y tratamientos médicos especializados, hospitalización, así como realizar traslados aéreos hacia Galveston, Texas, en Estados Unidos, de niñas, niños y adolescentes con quemaduras graves y o secuelas de éstas, es el objetivo del convenio celebrado entre el DIF Estado de México y la Fundación Michou y Mau, con el cual se atienden integralmente a alrededor de 14 pacientes mexiquenses al año con quemaduras en el 50 por ciento de su cuerpo o más.
Al fungir como testigo de honor del documento signado entre ambas instituciones, Fernanda Castillo de Del Mazo, Presidenta Honoraria del DIFEM, expresó su satisfacción de sumar esfuerzos entre Gobierno, fundaciones y sociedad civil para ejecutar acciones inmediatas y con atención especializada que favorezcan a la población vulnerable de la entidad mexiquense que atraviese por estas circunstancias.
“Me complace dar seguimiento a este convenio que desde el año 2006 se lleva a cabo en el Estado de México con el fin de servir y atender con la mejor calidad y prontitud a los pequeños que desafortunadamente han sufrido quemaduras graves”, expresó la titular del DIF Estatal.
Dicho convenio, firmado por Miguel Torres Cabello, Director General del DIFEM, y Virginia Sendel Iturbide de Lemaitre, Presidenta de la Fundación Michou y Mau, establece que entre los compromisos del DIFEM será recibir y dar seguimiento a los informes de casos de niñas, niños y adolescentes quemados del Estado de México canalizados por dicha Fundación; así como otorgar donativos monetarios para traslados en avión-ambulancia hacia el hospital Shriners de Galveston, Texas, en Estados.
De igual forma, el organismo proporcionará a través de la Dirección de Atención a la Discapacidad, prendas para quemaduras a los pacientes, con la finalidad de evitar secuelas y proveerlos de una mejor y pronta recuperación, mientras que en materia de prevención deberá informar con programas permanentes sobre los causantes de accidentes dentro y fuera del hogar.
Por su parte, la Fundación será la encargada de brindar atención médica especializada, traslados de emergencia en avión-ambulancia hacia dicho hospital de niñas, niños y adolescente con quemaduras en 50 por ciento o más de su cuerpo, dar seguimiento personalizados a cada paciente para que continúe su tratamiento médico, así como rehabilitación física y psicológica hasta que cumplan la mayoría de edad o sean dados de alta.
Asimismo, gestionará los trámites administrativos de visas, pasaportes y documentación que requieran los pacientes para continuar con sus tratamientos, y presentará un informe mensual y final, dentro de los 30 días naturales posteriores a la fecha pactada, en los que se observarán los datos generales de los beneficiarios y servicios de traslado y atención de secuelas brindados.
Gracias al trabajo coordinado entre ambas instituciones, se han podido atender casos como el del pequeño Orlando Azael Reyes, de seis años de edad, quien, de acuerdo con el testimonio de su mamá, Ana Hernández, cayó accidentalmente a una tina con agua hirviendo que le ocasionó quemaduras en el 50 por ciento de su cuerpo, recibiendo atención inmediata en el Hospital Nicolás San Juan, en Toluca, para después ser trasladado al Hospital Shriners. A su regreso a casa, recibió una prenda para quemaduras por parte del DIFEM.
Virginia Sendel mencionó que es muy importante llevar a cabo estrategias de prevención, como evitar que los niños se acerquen a la estufa mientras se están preparando alimentos, alejar ollas con líquidos hirviendo de estufas, mesas, botes y tinas de baño, alejar de los pequeños cerillos, veladoras, objetos calientes y sustancias inflamables, no dejar árboles de Navidad encendidos durante la noche o cuando la casa esté sola, así como verificar conexiones y contactos de luz, principalmente.