La argentina Brenda Micaela Barattini recibió una pena de 13 años de prisión por “tentativa de homicidio” al cortar parte de los genitales a un hombre, con quien mantenía una relación conflictiva, a casi dos años de concretarse el ataque.
Barattini, una arquitecta de 28 años, intentó en un primer momento justificar la mutilación como un acto de defensa propia ante una violación. Ante la acumulación de pruebas en contra, cambió su relato y argumentó haberlo atacado por la difusión de un vídeo sexual.