BOLIVIA.- La muerte en fuertes disturbios de al menos nueve manifestantes desde las duras protestas del viernes en, sobre todo, Cochabamba, agravó este sábado aún más la profunda situación que sufre Bolivia, mientras los políticos intentan avanzar hacia unas nuevas elecciones, tras la deposición del presidente Evo Morales, el domingo pasado.
El viernes murieron al menos cinco personas en Cochabamba, aunque ayer se informó de la muerte de al menos dos personas más en la región, sumadas a otras dos en otros puntos del país. Así, en total ya son 22 los muertos en las protestas en Bolivia, además de 500 heridos.