Hugo López-Gatell Ramírez ha sido contradictorio, siempre.
Así como dice una cosa, dice otra.
El subsecretario de Salud ha llevado al extremo su posición, al grado de ser desmentido y de insistir en tener la razón.
Mientras, la epidemia de Covid-19 se cobraba la vida de uno a uno, de grupo a grupo, hasta llegar a los 300 mil muertos, cuando 60 mil eran ya “el peor escenario”.
Que el cubrebocas no sirve, que no protege y que sólo funciona para no contagiar, en caso de ser portador del coronavirus.
Que de nada sirve cerrar las fronteras y los puntos de entrada al país al norte y al sur, porque, de cualquier forma, el virus va a llegar a México.
-No hay que perder de vista que por cada dosis que, por ejemplo, por acción judicial, por estas sentencias de amparo, se desviará hacia un niño o una niña cuyo riesgo es considerablemente menor, se le está quitando la oportunidad una persona que tiene un riesgo mayor, dijo López-Gatell en la mañanera de Palacio apenas en septiembre pasado.
-No está demostrado científicamente que la vacuna proteja o aporte algún elemento extra a los menores de edad, lo que hace innecesario vacunarles, dijo en dos o tres ocasiones el responsable de la política nacional contra el coronavirus.
– Es completamente legítimo que cada familia y persona quiera ser la primera en recibir la vacuna contra Covid-19, pero la salud pública piensa en las poblaciones para garantizar la equidad.
– Yo a mis nietos no los vacuno, dijo a su vez el secretario de Salud, Jorge Alcocer Villanueva, igualmente en septiembre cuando compareció en la Cámara de Diputados con motivo de la glosa del informe.
Bueno, cuando un juez ordenó vacunar a todos los menores porque, de lo contrario, se violan sus derechos a la salud, el gobierno de López Obrador impugnó el fallo ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para no aplicar la dosis a los menores, con excepción de quienes sufren alguna enfermedad.
Pues ese López-Gatell va a representar a México ante Canadá y Estados en la cumbre que se llevará a cabo el jueves -mañana- en Washington.
Para el científico, México debería aguantar las palizas que sufren otros.
Monreal no quiere tiro
Ricardo Monreal Avia quiere vivir en paz.
Sin lujos, porque sólo sirven para destacar las distintas situaciones económicas.
Un día después de que Claudia Sheinbaum Pardo, jefa del gobierno capitalino, dijera que se requiere un acuerdo con Monreal y con Ebrard, para apaciguar la marea, Monreal Avila ha reiterado todo el tiempo que no es necesario.
Los tres compiten por la candidatura presidencial de Morena en 2024, pero aún es prematuro.
Hasta ahora, la decisión aun lejos.
Vámonos: A Enrique Graue lo tienen dominado.
Un sujeto que terminó en 17 años su carreran no es un peliculón. Pero tiene un ci 21
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