INGLATERRA, Méx.- El mundo del rock se vistió de luto el pasado 22 de julio tras el fallecimiento de Ozzy Osbourne, ícono del heavy metal y líder de Black Sabbath. Su despedida fue tan épica como su legado: miles de fans, músicos y familiares se reunieron en Birmingham, Inglaterra, para rendirle homenaje.
Un cortejo fúnebre lleno de simbolismo
El ataúd de Ozzy recorrió lugares emblemáticos de su ciudad natal, incluyendo el Puente Black Sabbath, adornado con flores moradas que formaban su nombre. La procesión fue acompañada por la banda Bostin’ Brass, que interpretó clásicos como “Iron Man”, mientras la multitud coreaba su nombre.
Sharon Osbourne: dolor y amor en el último adiós
La viuda de Ozzy, Sharon Osbourne, apareció visiblemente devastada. Sostenida por sus hijos Jack y Kelly, colocó una rosa sobre el ataúd y saludó al público con el símbolo de paz que Ozzy solía hacer. Su gesto conmovió a miles de asistentes que gritaban “¡Te queremos, Sharon!”.
El legado musical que nunca morirá
Ozzy se despidió de los escenarios apenas semanas antes de su muerte, en el concierto Back To The Beginning en Villa Park. Allí compartió escenario con leyendas como Metallica, Guns N’ Roses, Tool y Pantera, en una celebración que reunió a más de 40,000 personas.
Tributos y homenajes globales
Desde mensajes de artistas como Elton John y Dolly Parton, hasta planes para lanzar un largometraje titulado Ozzy’s Final Bow, el impacto de su partida ha sido mundial. Su influencia en el rock y el metal seguirá viva en generaciones futuras.







