TLALNEPANTLA, Méx. José Luis nunca soñó con ser médico, licenciado o maestro. Sabía que era difícil y más aún con los promedios que sacó en primaria y secundaria. Abandonó sus estudios en el primer semestre del Conalep y empezó a trabajar. La realidad nunca le permitió soñar.
La Encuesta Juventud del estado de México 2009, realizada por el Instituto Mexiquense de la Juventud (IMJ), señala que en la entidad sólo cuatro de cada 10 jóvenes continúan estudios universitarios, debido principalmente a problemas económicos de sus familias.
“Es muy difícil, es muy complejo el tema de la deserción escolar”, aseguró Alfonso Cárdenas Zepeda, director del Centro Universitario UAEM Valle de México, ubicado en Atizapán, al que asisten tres mil jóvenes.
Rubén Mendoza Ayala, presidente del Consejo Cívico de Tlalnepantla, consideró que se trata de un problema “terrible, producto de la crisis económica y la falta de generación de empleos”.
MENOS DE LA MITAD CONCLUYE ESTUDIOS
La encuesta del IMJ, aplicada en el 2009 a jóvenes de entre 12 y 29 años de edad, indica que 39.6% de entrevistados abandonó sus estudios o no los concluyeron, sobre todo por falta de dinero, lo que a su vez origina su incorporación a la vida laboral.
Según la encuesta, 25.9% de los jóvenes dejó sus estudios porque comenzó a trabajar. Es decir, más de una cuarta parte de la deserción escolar obedece a la incorporación de los muchachos a actividades laborales.
Los resultados establecen que la deserción escolar por falta de recursos económicos es más grave en los menores de 19 años de edad, quienes empiezan a laborar, además de que 34.5% de mujeres y 44.7% de hombres abandonan los estudios en niveles básicos.
Del total de estudiantes de todos los niveles en el estado de México, 88% depende económicamente de sus familias y sólo 8.7% recibe alguna beca, mientras que 49% de los jóvenes que dejan la escuela para trabajar apoyan económicamente a sus familias.
Un diagnóstico de la Asociación Nacional de Padres de Familia (ANPF) detalla que existe bajo nivel de aprovechamiento escolar en la educación pública del estado de México, que pasó del décimo al 14 lugar en la materia a nivel nacional.
La deserción escolar se agudiza en municipios de la zonas norte y oriente de la entidad, en donde se concentran mayores niveles de marginación social.
En el reciente Concurso de Ingreso a la Educación Media Superior de la Comisión Metropolitana de Instituciones Públicas de Educación Media Superior (Comipems) participaron 315 mil 848 alumnos, de los cuales 85.2% aprobó el examen, 4.7% no acudió a la prueba, 7.7 no obtuvo el certificado de secundaria y 2% no logró el porcentaje mínimo requerido para que les asignaran lugar, que era de 30 aciertos.
EDOMEX, 12% DE LA MATRÍCULA NACIONAL
Datos de la Secretaría de Educación del estado de México señalan que el actual ciclo escolar registra 4.4 millones de estudiantes, de los cuales 3.3 millones corresponden a preescolar, primaria y secundaria.
La matrícula estudiantil del estado de México es la más cuantiosa del país y representa 12% del total de estudiantes mexicanos.
Sin embargo, a pesar de que los niveles de preescolar y primaria reciben prácticamente a todos los niños mexiquenses, a partir de secundaria empieza la deserción, que se agrava en preparatoria y universidad.
Al final, sólo cuatro de cada 10 jóvenes logra terminar alguna carrera, ya sea técnica o a nivel licenciatura, mientras que el resto trunca sus aspiraciones académicas.
La diputada local Gabriela Gamboa Sánchez, del PAN, propuso al gobierno estatal destinar mayores recursos al IMJ para atender a este sector social, que se enfrenta un panorama de discriminación y de pocas oportunidades de desarrollo.
“Tenemos que pensar que los más de cuatro millones de mexiquenses jóvenes esperan no sólo una oportunidad para ingresar a la escuela y seguir sus estudios, sino un buen empleo que pueda apoyarlos para sostener el costo de la educación. Pero también requieren ser vistos como una realidad que pesa sobre las decisiones de los representantes sociales, quienes no podemos quedarnos en el discurso de asegurarlos como nuestro futuro”, aseveró.
FENÓMENO MULTIFACTORIAL
El secretario de Educación del estado de México, Alberto Curi Naime, precisó que la deserción escolar en el estado de México es de 15.8%, debido principalmente a la crisis económica que afecta al país desde hace una década.
“Es normal que en ambos niveles (medio superior y superior) haya mayor deserción porque se necesitan más recursos para costearlos, por lo que hemos implementado programas de becas en escuelas públicas y privadas”, apuntó.
A su vez, Alfonso Cárdenas Zepeda, director del Centro Universitario UAEM Valle de México, ubicado en Atizapán, mencionó que la deserción escolar obedece a múltiples factores, principalmente económicos.
Agregó que en al ámbito universitario la deserción tiene que ver con el interés del alumno en la carrera que estudia y a causas económicas, pues requieren trabajar para apoyar la manutención de sus familias.
“La deserción también se debe a causas económicas, en donde el muchacho ya tiene que trabajar para cooperar económicamente en la familia. Desafortunadamente a veces no tiene los promedios para alcanzar becas y apoyos económicos, y empiezan a ganar dinero y finalmente se van. Y también tiene que ver con aspectos familiares, empiezan a asumir responsabilidades, de repente son padres de familia y entonces también es un factor”, dijo.
Cárdenas Zepeda afirmó que la deserción escolar en el campus Atizapán de la UAEM no es grave, pues alcanza 4% de alumnos, aunque el objetivo es disminuirla en el corto plazo.
REZAGO
El Sistema de Información de Tendencias Educativas en América Latina (SITEAL), en el artículo “El tránsito del nivel medio al superior y acceso diferenciado a carreras terciarias y universitarias”, elaborado en el 2006, ubica a México en el nivel intermedio en cuanto a deserción escolar.
Nuestro país es superado por Chile, Colombia, Uruguay y Costa Rica, en donde en las dos primeras naciones seis y siete de cada 10 jóvenes terminan la preparatoria, pero sólo cuatro de cada 10 graduados inicia una carrera profesional.
En México cuatro de cada 10 jóvenes concluyen estudios de preparatoria, pero sólo 50% continúa estudios universitarios, es decir 2 de cada 10.
Debajo de México están Honduras, Guatemala y Nicaragua, en esta última donde 30% de los jóvenes finaliza estudios de preparatoria, mientras que en los dos primeros países sólo lo logra 20% de los alumnos.
REALIDAD NACIONAL
Mendoza Ayala concluyó que el problema de la deserción escolar “se tiene que resolver, pero en conjunto. Un sistema nacional de becas, se tiene que ver cuáles son las causas de esa deserción y cambiar todo el sistema educativo, de abajo hacia arriba”.
Cárdenas Zepeda precisó que “independientemente de estar midiendo de alguna manera la deserción escolar, lo preocupante de la Universidad es que el alumno tenga las herramientas y desarrolle su potencial en términos de cumplir con su proyecto educativo”.
Y mientras el problema se resuelve, José Luis enfrenta una realidad lacerante. Tiene 18 años de edad y habita en una unidad de interés social de Tultitlán. Hace tres años terminó la secundaria, pero no fue aceptado en un CCH, sino en un Conalep, al que acudió sólo unas semanas.
Dice que no le interesó la carrera técnica que le asignaron y sus padres enfrentaban serios problemas para pagar sus estudios, sobre todo el transporte público, que es el más caro del país, por lo que decidió abandonar la escuela.
Ahora labora en una bodega y percibe poco más de 800 pesos semanales de salario. Su horario le impide continuar sus estudios, pero confía en que su dedicación al trabajo le abra nuevas oportunidades.