CUAUTITLAN IZCALLI, Mèx.- La corrupción e impunidad que hay en políticos de todos los partidos debe ser sancionada, afirmó el diputado local Héctor Karim Carvallo Delfín, por lo que adelantó ya prepara una demanda ante el Órgano Superior de Fiscalización del Estado de México para acusar al ex alcalde David Ulises Guzmán Palma por enriquecimiento ilícito.
Durante su gira de trabajo en que entregó materiales de impermeabilización a la escuela primaria Las Américas, en la comunidad Residencial La Luz, el diputado local por el Distrito XLIII con cabecera en Cuautitlán Izcalli, subrayó que Guzmán Palma durante su gestión como alcalde de esta ciudad adquirió una residencia en Bosques del Lago, cuya compra se valuó en cinco millones de pesos.
Y detalló “una vivienda en esa zona, junto a la rivera del Lago de Guadalupe, está valuada en más de 20 millones de pesos, él adquiere una que cuenta con más de dos mil 300 metros cuadrados de terreno y mil 700 metros cuadrados de construcción, con cancha de tenis, alberca, sala de conferencias, archivo y salón de juegos y paga sólo cinco millones, con un crédito hipotecario de cuatro millones y un millón más en efectivo, a todas luces una compra irregular, ya que además los permisos que obtuvo de desarrollo urbano los firmó el titular que ya no estaba en el cargo”, destacó al referirse a Joel Mendoza Ruíz, titular de desarrollo urbano y después de planeación en la administración 2006-2009.
Carvallo Delfín indicó que presentará las denuncias ante el Órgano Superior de Fiscalización y la Contraloría del Poder Legislativo del Estado de México para acusar a Guzmán Palma por enriquecimiento ilícito, pues afirmó ha corroborado en el Registro Público de la Propiedad que dicho inmueble fue adquirido por el ex alcalde panista y su esposa Adriana Moreno Díaz, candidata perdedora a una diputación federal en 2009.
Por último, el representante popular de Cuautitlán Izcalli destacó “la sociedad debe participar decididamente en evitar las formas de corrupción e impunidad que hay en el ejercicio de la política y el servicio público, la sociedad mexicana en su conjunto es calificada como la más corrupta del mundo, debemos transformar eso y dar ejemplo a las nuevas generaciones de una conducta apegada al derecho”.