CIUDAD DE MÉXICO, Méx.- Los verdaderos muros que México debe derribar no son como el que se pretende construir en su frontera norte, sino los de la pobreza, falta de oportunidades y desigualdad educativa, los que generan desesperanza, marginación, migración e inseguridad, y que no son privativos de este país, aseguró Enrique Graue, rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Al inaugurar el coloquio internacional “Los acosos a la civilización. De muro a muro”, en la Sala Nezahualcóyotl del Centro Cultural Universitario (CCU), la máxima autoridad de esa casa de estudios subrayó que la desigualdad social es la verdadera barrera a derribar, “un muro que nos separa y divide como sociedad y amenaza a la civilización actual”.
Puso énfasis en que “vivimos en un mundo globalizado y debemos enfrentar la realidad para aspirar a tener un planeta sustentable y una sociedad con justicia social”.
Recordó que la caída del muro de Berlín es un símbolo de esperanza al constatar, con su caída, que no importan los obstáculos que se nos antepongan, cuando éstos están fincados en la sinrazón e intolerancia, siempre caerá, como sucedió con el muro de Berlín.
“Y lo mismo será con el muro que pretende construir Donald Trump, un muro demagógico, xenofóbico y racista; si ese muro llegara a existir nos ofende como nación, pero no nos debe preocupar”, añadió.
Del muro que debemos ocuparnos, dijo, es del de la desigualdad y “hay que diluirlo desde nuestras propias trincheras, con nuestro actuar individual y como sociedad”, porque “los otros muros que no perciben otro fin más que ignorar la realidad, están condenados al fracaso y, a ellos, a nombre de la Universidad, nuestro rechazo, desprecio e indignación”, subrayó.