CIUDAD DE MÉXICO, Méx.- Como un personaje polémico, controvertido que tuvo una corte efímera de apenas ocho meses, así recordó la escritora mexicana Ana García Bergua al militar y emperador Agustín de Iturbide (1783-1824).
En el marco del ciclo “visitas literarias”, que organiza la Coordinación Nacional de Literatura del Instituto Nacional de Bellas Artes, la narradora recreó el recorrido que hizo, quien fuera el principal artífice de la independencia de México, a su entrada a la Ciudad de México el 27 de septiembre de 1821 por diversas calles del Centro Histórico.
Antes la escritora, Premio de literatura Sor Juana Inés de la Cruz 2013, señaló que Agustín de Iturbide tuvo un reinado un tanto ridículo, según la novela de la escritora Rosa Beltrán “La Corte de los Ilusos”.
“La obra de Rosa Beltrán, me parece un modo muy atinado, muy particular de ver lo que pudo haber sido una corte de oropel, salida de pronto e inventada para pacificar al pueblo y dar una estructura de poder que más tarde se vino abajo”, dijo.
De acuerdo con García Bergua, Iturbide fue el personaje que unificó al país para proclamar la Independencia de México, ‘después vinieron los líos entre logias masónicas, federalistas y centralistas, y el largo siglo XIX un periodo de muchos gobiernos y guerras’.
“Lo que hizo fue protagonizar un momento en el que oficialmente terminaban las guerras de Independencia y comenzaba la vida de México como país.
“No fue villano, sino un general realista que se cambió de bando a la mera hora y que grilló al pobre Vicente Guerrero, tampoco fue héroe porque al final, fue una figura que representó a muchas otras, al propio Virrey Apodaca o a los independentistas. Él personificó una necesidad”, consideró la escritora.
Acompañado de un grupo de cerca de 30 personas, la narradora efectuó el recorrido de Agustín de Iturbide en su entrada a la capital, desviándonos como él lo hizo frente al balcón de la ‘güera’ Rodríguez en la calla de San Francisco, hoy Madero, para terminar en el edificio que corresponde al palacio donde el emperador tuvo su corte.
El recorrido partió del Hemiciclo a Juárez, donde la narradora hizo una breve introducción a cerca de Iturbide y de la novela de Rosa Beltrán, quien, a su vez, reinventa la vida y la muerte del único emperador mexicano: su fastuosa corte, sus curiosos parientes, amantes y fieles enemigos.
“En este libro, Rosa habla de la corte efímera de Iturbide en el Palacio de Moncada, hoy la Fundación Cultural Banamex”, dijo la autora quien, a través de la literatura, viajó en el tiempo al siglo XIX para narrar los diferentes pasajes de Iturbide.