EL VATICANO, Méx.- Francisco manifestó hoy su apoyo al Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular, un acuerdo de las Naciones Unidas para el cual México funge como co-facilitador y que es una de las prioridades en la política exterior del país.
Tras su impartir su bendición con la oración mariana del Angelus, asomado a la ventana de su estudio en el Palacio Apostólico del Vaticano y ante más de 15 mil personas congregadas en la Plaza de San Pedro, el Papa se refirió también al pacto mundial sobre refugiados, que también promueve la ONU.
Hablando en italiano, recordó que justamente el miércoles próximo se celebrará la Jornada Mundial del Refugiado, instituida para llamar la atención sobre lo que viven, “a menudo con grandes ansiedades y sufrimientos, nuestros hermanos obligados a huir de su tierra a causa de los conflictos y persecuciones”.
Precisó que este año la jornada coincide con las consultas entre los gobiernos para la adopción de ambos pactos, antes de fin de este año.
“Deseo que los Estados involucrados en estos procesos alcancen un acuerdo para asegurar, con responsabilidad y humanidad, la asistencia y la protección de quien está forzado a dejar el propio país”, dijo.
“Pero también cada uno de nosotros está llamado a ser cercano a los refugiados, a encontrar con ellos momentos de encuentro, a valorar sus contribuciones, porque también ellos puedan insertarse mejor en las comunidades que los reciben”, agregó.
Consideró que en ese encuentro, en ese apoyo y en ese respeto recíproco hacia los extranjeros está la solución a tantos problemas.
Luego, Jorge Mario Bergoglio recordó que la víspera, en Caracas, fue proclamada como beata María del Carmen Rendiles Martínez, fundadora de las religiosas Siervas de Jesús de Venezuela.
Explicó que esa monja, nacida y muerta en Caracas en el siglo pasado, junto a las hermanas sirvió con amor en las parroquias, en las escuelas y junto a los más necesitados.
“Alabamos al señor por esta fiel discípula suya y confiamos a su intercesión nuestras oraciones por el pueblo venezolano. ¡Y saludamos a la nueva beata y al pueblo venezolano con un aplauso!”, precisó, invitando a todos a aplaudir.
Además, se mostró preocupado por la “suerte dramática” de las poblaciones de Yemen, que están agotadas por “años de conflicto”.
“Hago un llamado a la comunidad internacional para que no ahorre esfuerzo alguno para llevar con urgencia a la mesa de las negociaciones a las partes involucradas y evitar el empeoramiento de la ya trágica situación humanitaria. Rezamos a la Virgen por Yemen”, clamó. Y rezó un Ave María en voz alta con todos los presentes.