WASHINGTON, EU.- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció hoy que firmará una orden ejecutiva para detener la separación de niños de familias migrantes en la frontera sur, con lo que parece cedió a la creciente presión contra su controversial política antiinmigración implementada tres meses atrás.
“Vamos a firmar una orden ejecutiva. Esperamos contar con el Congreso, obviamente, pero vamos a firmar una orden ejecutiva pronto para mantener a las familias juntas”, dijo el mandatario, durante una reunión con legisladores en la Casa Blanca.
Trump, quien insistió de manera falaz en culpar a los demócratas por esta acción, dejó en claro que su orden no significará un relajamiento de la dura política migratoria, porque así lo demanda su base electoral.
“Queremos seguridad para nuestro país. Los republicanos quieren seguridad e insisten en seguridad para nuestro país, y vamos a tener eso a la vez que tenemos compasión, vamos a mantener a las familias unidas, y eso es importante”, dijo.
Trump hizo su breve y críptico anuncio durante una reunión con legisladores republicanos en la Casa Blanca, en la víspera de que su bancada en la Cámara de Representantes discuta mañana jueves una iniciativa para responder a esta crisis humanitaria.
Bajo esta iniciativa republicana, las familias inmigrantes detenidas en la frontera sur serán mantenidas juntas bajo la autoridades del Departamento de Seguridad Interna (DHS) durante el tiempo que dure el proceso legal para determinar su situación.
De igual manera, asignará una partida de siete mil millones de dólares para establecer centros de detención para estas familias, y de acuerdo con el líder republicano, Paul Ryan, solucionará también la situación de los 690 mil beneficiarios del programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA), aunque sin precisar detalles.
“Vamos a tomar acción para mantener a las familias unidas mientras hacemos valer nuestras leyes de migración”, dijo antes el legislador en conferencia de prensa.
Ryan descartó la posibilidad de discutir y aprobar una iniciativa que se ocupe solo de mantener unidas a estas familias, evidenciando la división que existe en su bancada sobre el tema.
Donald Trump, quien ha insistido que la solución a esta crisis descansa en manos del Congreso, insistió en la necesidad de mantener las duras políticas migratorias para evitar el ingreso de criminales.
“Debemos mantener la dureza, o de lo contrario nuestro país va a ser rebasado por la gente, por el crimen, por todas las cosas con las que no estamos de acuerdo… tenemos que mantener nuestra frontera fuerte. Vamos a ser rebasados por el crimen y por gente que no debe estar en nuestro país”, sostuvo.
El presidente estadunidense dijo que las imágenes de los niños separados son fuertes, y aseguró de manera falaz que tanto él como los republicanos en el Congreso están a favor de políticas duras y mantener a las familias unidas, pero insistió en generalizar a los inmigrantes como un nexo con el crimen en Estados Unidos.
“No queremos crimen en este país. No queremos que venga gente (inmigrante). No queremos que gente del Medio Oriente venga a nuestras fronteras usando niños. No queremos eso. Estamos haciendo un buen trabajo para permitir eso y no vamos a dejar que eso pase”, añadió.