CIUDAD DE MÉXICO, Méx.- La delegación de senadores y diputados federales de todos los partidos que se reunieron en Washington con congresistas de Estados Unidos, les manifestaron su indignación y rechazo a la política de “tolerancia cero” que en materia de migración impulsa el presidente Donald Trump.
El presidente del Senado, Ernesto Cordero Arroyo, explicó en entrevista vía telefónica desde Washington que dicha política “creemos que es inhumana, creemos que es absolutamente indefendible una política de este tipo donde se separen a las niñas y los niños de sus padres”.
Como parte de la gira de trabajo que realizan senadores y diputados del Congreso de la Unión para atender la crisis migratoria, Cordero Arroyo explicó que se han reunido con diversos congresistas estadounidenses, entre ellos Bob Corker, presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, quien les externó que los legisladores de ese país no están tranquilos con la política de tolerancia cero del presidente Trump.
En el Congreso mexicano “reprobamos esta política de cero tolerancia, es inadmisible que se separe a las niñas y los niños de sus padres, México no está dispuesto a ser parte de esto, ni a tolerar este tipo de abusos”, expuso el legislador del Partido Acción Nacional (PAN).
De acuerdo con el panista, la mayoría del Senado estadunidense considera inadmisible que se separe a las niñas y los niños de sus padres y por ello deben establecerse mecanismos de coordinación con el Congreso de ese país para evitar que esas cosas sucedan.
“Está en el mejor interés de la región preservar las fronteras, pero que la condición necesaria debe ser la protección de los derechos humanos”, enfatizó el legislador.
Detalló que el Congreso Mexicano también rechazó las afirmaciones del presidente Donald Trump de que México no ha hecho su trabajo para detener la migración, por lo que aseguró que “es bastante injusto que nos echen la culpa”.
Según el panista, la migración indocumentada de México hacia Estados Unidos está en sus menores niveles desde hace 40 años. Además, en la última década hubo periodos en los que la migración no es de México hacia Estados Unidos, sino al revés; “por supuesto que hemos hecho la tarea, por supuesto que hemos mejorado las condiciones de vida de los mexicanos”.
El senador Cordero Arroyo comentó que la delegación de legisladores mexicanos también se reunió con Luis Almagro, secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), encuentro en el que hubo una gran coincidencia respecto a la postura de México, y enfatizó “que todo el continente está muy preocupado y muy agraviado por lo que está sucediendo”.