TOLUCA, Méx.- Durante los primeros nueve meses de vida de Frida Sofía, su madre detectó que la niña no reaccionaba a ningún ruido, por lo que acudió a la Dirección de Atención a la Discapacidad del DIF Estado de México (DIFEM), donde fue diagnosticada con hipoacusia profunda bilateral.
Tras el diagnóstico, la niña recibió tratamiento y posteriormente un auxiliar auditivo, no obstante, con el transcurso de los años, requirió una cirugía para implante coclear y para completar su tratamiento, el DIFEM le otorgó un concentrador coclear, ayuda especial que, al igual que ella, reciben más de mil 600 personas sordas al año.
Al respecto, María Guadalupe, madre de Frida, refirió que durante los nueve años de vida de su hija, la pequeña ha sido apoyada por el DIFEM y que a la par de la entrega de este concentrador coclear, la niña tomará terapia de lenguaje, a fin de lograr la comunicación e integración en su hogar, escuela y entorno.
El objetivo del DIFEM es lograr la integración en todos los ámbitos de las personas con alguna limitante física, mental o sensorial, por lo que la entrega de este tipo de ayudas funcionales como los auxiliares auditivos o implantes cocleares, es un apoyo prioritario que brinda la institución.
A la par de la entrega de apoyos funcionales y ayudas especiales, la Dirección de Atención a la Discapacidad realiza una labor integral, es decir, los pacientes también reciben terapias de rehabilitación, alternativas de integración educativa y laboral, y ofrece talleres de capacitación y cursos para una vida independiente.