En el 2010, el matrimonio conformado por Kistine Elizabeth y Michael Barnett adoptó a una niña de 8 años llamada Natalie Grace, pero lo que nunca imaginaron fue que en realidad “su hija” fuera una psicópata de 22 años que padecía enanismo.
La pareja fue acusada de negligencia por abandonarla y mudarse a Canadá, porque “la niña” quería matarlos.
“Se paraba a vernos en medio de la noche. No podías irte a dormir. Tuvimos que esconder todos los objetos afilados. La vi poner productos químicos, lejía, Windex algo así, en mi café y le pregunté, ¿qué estás haciendo? Ella dijo: “Estoy tratando de envenenarte”, afirmó Kistine Elizabeth.
Los padres adoptivos llevaron a la niña con un especialista, ahí confesó que no tenía 9 años sino 22. Durante una consulta en el Hospital Laure Carter admitió que deseaba matar a sus padres y que no se sentiría mal porque le parecía divertido.
“Amenazó con apuñalarnos a mí y a mi esposo. El acto sería cometido mientras estuviéramos dormidos y después, la “niña” enrollaría a los cadáveres en una manta para enterrarlos en el jardín.
Natalie, por lo que han declarado sus adoptantes, no tenía dientes de leche, no parecía una niña, tenía vello púbico, se comportaba de forma extraña.
Mes a mes presentaba signos de atravesar el periodo menstrual, además de una enfermedad psicológica que solo había sido diagnosticada en adultos.
A pesar de haber sido acusados de abandono infantil, la pareja logró salir bajo fianza días después, mientras que de la mujer no se sabe nada.