Andrés Manuel López Obrador es un tipo rencoroso, obsesivo, frustrado, acomplejado y mentiroso.
Alejandro Moreno Cárdenas y sus dirigidos en el Partido Revolucionario Institucional (PRI) están bajo fuego.
¿Su delito?
Votar en contra de la reforma judicial, esa que, paradójicamente, Morena consiguió gracias al voto de un malandrín y negociando la ley – órdenes de aprehensión al archivo a cambio del senador 86- motivo suficiente para que López Obrador ordenara una cacería del ex gobernador de Campeche, hoy senador.
Así, curiosamente el día de la votación en el Senado, después de comprar a dos saltimbanquis del PRD y hacer perdedizo a otro de MC, además del citado voto 86 -negociado con Miguel Ángel Yunes Linares y sus hijos Miguel Ángel Yunes Márquez, entonces del PAN – se modificó el dictamen de la comisión de prerrogativas del Instituto Nacional Electoral (INE) que venía a favor y, de acuerdo los consejeros leales al gobierno federal, votaron en contra.
Anoche, el organismo que preside la incondicional de López Obrador, Guadalupe Taddei, quien sustituyó a Lorenzo Córdova Vianello, votó en contra del proceso y de la reelección en el consejo general, porque “no se pueden modificar estatutos de un partido o instituto político, mientras no haya concluido un proceso electoral”.
Argumenta el INE que mientras, en este caso, Claudia Sheinbaum Pardo no hubiera sido declarada candidata ganadora a la Presidencia -lo que ocurrió el 15 de agosto, cuando recibió su constancia que así la acredita de parte del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF)-, el proceso no había concluido.
Moreno Cárdenas asegura que hay un criterio del TEPJF donde unánimemente se pueden acreditar las reformas tal y como lo hizo Morena en 2018 y pregunta:
-O sea, ¿Morena sí lo puede hacer?
Vamos a recurrir al tribunal electoral federal para que nos dé lo que nos corresponde en derecho y estamos seguros que van a cumplir, porque son sentencias que el tribunal ha avalado.
Y sí, si hay una sentencia en el mismo sentido, el Trife no puede concluir ahora que no procede o que es ilegal.
LA GUERRA DE LOS CHAPITOS Y MAYITOS
Mientras, Sinaloa, la tierra del no pasa nunca nada, arde por una guerra entre los hijos de Ismael El Mayo Zambada y Joaquín El Chapo Guzmán.
La traición de Joaquín Guzmán López, cuando El Mayo, compadre de su padre, fue puesto para ser detenido en Nuevo México -a unos kilómetros de Texas- en junio pasado desató esta guerra de cárteles.
Cuatro días de enfrentamientos, de batallas y de al menos doce muertos y el cínico López Obrador , como siempre, señala en su aburrida conferencia que la culpa la tienen los medios convencionales por exagerar, por inflar o desinflar según les convenga.
Hasta el gobernador, zalamero de López Obrador, Rubén Rocha Moya, señalado de tener nexos y tratos con El Mayo y El Chapo, ya reconoció que la situación está fuera de control y suspendió la ceremonia del Grito de Independencia, el domingo 15.
Ciudad Juárez, Chihuahua, cuando era la urbe más peligrosa del mundo, tuvo que suspender también la ceremonia en 2010 -en el sexenio de Felipe Calderón- porque el narcotráfico dominaba.
Galeana, Nuevo León, también suspendió los festejos patrios por el crimen.
Pero dice el señor que ya se va a La Chingada, su rancho en Palenque, Chiapas, que no pasa nada.
VAYA CONTRADICCIÓN.
VAYA INCONGRUENCIA.
Andrés Manuel y su séquito de Movimiento Regeneración Nacional (Morena), que presumen ser distintos, no mentir, no robar y no traicionar… no son distintos, sí mienten, sí roban y sí traicionan.
Analice, por favor:
Aprobar la reforma judicial, elección de jueces, magistrados y ministros negociando, traficando, con la ley.
¿Qué le parece?
Como le dije al inicio de esta columna, con el apoyo de una familia de malandros que encabeza Miguel Ángel Yunes Linares, el traidor número uno, apoyado en sus hijos Miguel Ángel Yunes Márquez, su esposa, y su carnal Fernando Yunes Márquez.
Echando mano de triquiñuelas y marrullerías fuera de la ley.
Ayer quedó aprobada en 21 congresos estatales – la ley señala 17, mínimo- y López Obrador quiere promulgarla y gritarla el próximo domingo, 15 de septiembre.
Y eso que son distintos.
¿Qué tal si fueran iguales?
Vámonos:
Coca Cola cierra sus operaciones en Puente de Ixtla, Morelos, después de 20 años.
Coca Cola FEMSA dejó ese municipio, donde daba empleo al menos a 300 personas, por culpa de los malandros que el demente de Palacio asegura son exageración de los medios.
En manos de quién cayó el país.
alberto.montoya@diahabil.com.mx @albermontmex