CUAUTITLÁN IZCALLI, Méx.- El desarrollo urbano desorganizado, la corrupción de autoridades de los tres niveles de gobierno y la falta de leyes para castigar a quienes han atentado contra la naturaleza, ha provocado que el deterioro de la Cuenca Lago de Guadalupe se vuelva un desastre ecológico.
Así lo afirmó Roberto Espinosa Carrillo, de la organización ambientalista Aquabiosphera, y habitantes de Cuautitlán Izcalli, quienes demandaron a las autoridades de gobierno y a los candidatos al gobierno del estado de México, asuman el compromiso real de sanear y salvar de la destrucción este cuerpo de agua.
Roberto Espinosa aseguró que la contaminación encontrada en el Lago de Guadalupe se agrava día a día “pues se ha documentado, a través de estudios químicos, que las aguas de ese cuerpo lacustre tiene una contaminación de hasta 600 veces por encima de los rangos que se consideran para aguas contaminadas”.
Y explicó que el Lago de Guadalupe recibe más de 15 millones de metros cúbicos de aguas residuales al año, las cuales se caracterizan por un alto porcentaje de materia orgánica biodegradable, como desechos alimenticios, heces fecales, residuos vegetales y animales, entre otros desechos domésticos.
Por su parte, estudiantes universitarios que realizaron el experimento químico, explicaron que en las aguas del Lago de Guadalupe se encontraron valores de Demanda Química de Oxigeno superiores a los 600 partes por millón, rangos que explican la muerte masiva de peces en los años 2004 y 2005, por lo que exigieron a los candidatos al gobierno del estado de México, se asuma un compromiso real para salvar el cuerpo de agua más importante del Valle de México.