Hoy se cumplen diez años del caso que terminó con el sexenio de Enrique Peña Nieto prematuramente y que se convirtió en una de las más graves mentiras de Andrés Manuel López Obrador para ganar simpatías y votos en 2018.
Aquella noche del viernes 26 de septiembre de 2014, ya madrugada del sábado 27, me encontraba en la redacción del diario Ovaciones en el que trabajé 33 años y dirigí de 2006 a 2023.
Ya habíamos cerrado la edición cuando llegó la primera nota de la extinta agencia Notimex que informaba sobre “unos 70 estudiantes de la normal de Ayotzinapa” que eran buscados por la policía en ese municipio de Guerrero.
La nota la publicamos en las páginas interiores y le dimos el cintillo en la portada. Nadie, salvo La Jornada, le dio importancia.
Ni la publicaron, porque cierran temprano o porque la desestimaron.
Pero los diarios del domingo, que se trabajan un día antes, ya la traían en portada. Todos.
La verdad histórica del entonces procurador general de la República, Jesús Murillo Karam, sostenía que los 43 estudiantes de la normal de fueron asesinados y sus cuerpos calcinados y tirados en el río San Juan.
¿Lo recuerda?
La Comisión de la Verdad, que López Obrador inventó para engañar a los padres de esos estudiantes, emitió unas conclusiones… ¡que coinciden con la de Murillo Karam!
Es un crimen de Estado, fácilmente
Vámonos: El Ejército sí sabía que queso noche les iban a dar una paliza