El Palacio Nacional amaneció rodeado de vallas metálicas de casi tres metros de altura como parte del operativo de seguridad previo a dos manifestaciones programadas para el sábado 15 de noviembre: la marcha de la Generación Z y una protesta convocada por la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).
Vallas metálicas protegen el recinto histórico
Desde el lunes 11 de noviembre, trabajadores comenzaron a instalar estructuras metálicas en los accesos principales del Palacio Nacional, incluyendo las calles Corregidora, Moneda y el frente que da al Zócalo capitalino. Las vallas también fueron colocadas frente a la Catedral Metropolitana y otros edificios históricos, en previsión de posibles disturbios.
Doble protesta: jóvenes y maestros
La marcha de la Generación Z, convocada principalmente por jóvenes menores de 28 años a través de redes sociales, busca exigir un alto a la violencia y mayor participación política. Por otro lado, la CNTE anunció una movilización en defensa de sus derechos laborales y en rechazo a reformas educativas que consideran regresivas.
Reacciones divididas ante el blindaje
La colocación de vallas generó opiniones encontradas en redes sociales. Algunos usuarios señalaron que el gobierno teme a la movilización ciudadana, mientras que otros defendieron la medida como necesaria para proteger el patrimonio histórico ante cualquier eventualidad.
Operativo de seguridad en el Zócalo
Además del blindaje físico, se desplegará un operativo de seguridad con elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) para vigilar el desarrollo de ambas protestas. Se prevé el cierre parcial de calles y restricciones en el acceso peatonal al primer cuadro de la ciudad.







