Tras el retiro de Cuauhtémoc Cárdenas en la carrera por la dirigencia del Partido de la Revolución Democrática (PRD), la pelea será entre Carlos Navarrete y Marcelo Ebrard.
Los Chuchos, se lo dije, jugaban a dos cartas. Cárdenas sólo fue distractor y la pandilla lo utilizó a la perfección. El lo sabía y se dejó querer, utilizar. Se usaron.
Jesús Ortega y Jesús Zambrano, compinches, creadores y firmantes del Pacto por México, tienen el control del partido desde cuando menos hace tres administraciones, apoyados en incondicionales como Guadalupe Acosta Naranjo y Graco Ramírez, gobernador de Morelos, a quien se le desmorona el estado y nada hace.
El desmarque de Cárdenas fue inmediato, pese a que los jesuses pretendieron enredar al asegurar que el hijo de Lázaro Cárdenas no se descartó del todo.
En cuanto comenzó el congreso nacional del sol azteca en Oaxtepec, Morelos, el fundador del PRD en 1988 y tres veces candidato presidencial fue contundente:
– Quiero decirles que lo he pensado seriamente y estimo que esta debe ser una oportunidad para otros. Agradezco la confianza de mis compañeros, de quienes han pensado que yo pueda volver a la presidencia del partido-.
– Es conveniente la reforma estatutaria para que los ex presidentes podamos sostenernos en un cargo. La reforma conviene al PRD, es mi punto de vista, pero no creo en reformas con dedicatoria-, remató y dejó el auditorio mudo, muerto.
– Si nos dividimos, se corre el riesgo de que el partido quede en manos de fuerzas que han trabajado por la división, apoyando al entreguismo y a la reacción-, alertó.
Así, Cárdenas, a quien Los Chuchos endulzaron el oído, marcó distancia y dejó en la orfandad a quienes lo traicionaron cuando Andrés Manuel López Obrador fue amo y señor del PRD por doce años.
– Vamos a ver qué ocurre-, dijo por su parte El Carnal Marcelo.
Y el PRD deberá elegir entre Zambrano y Ebrard, porque Carlos Sotelo es candidato comparsa.
Entrada la noche, Alejandro Sánchez Camacho, secretrio general del PRD y leal a René Bejarano y su esposa, Dolores Padierna, de Izquierda Democrática Nacional (IDN), aseguró que hubo un acuerdo: adiós al Pacto por México si PRI y PRD aprueban la reforma energética como está.
Cinco mil mdp al SNTE por buena conducta
Cinco mil millones de pesos para tener contentos a los maestros del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE).
El gobierno federal, satisfecho con la sumisión de Juan Díaz de la Torre, líder gremial tras el encarcelamiento de Elba Esther Gordillo por lavado y delincuencia organizada, le dio su premio: refinanciamiento de la deuda de los alrededor de 1.8 millones de profesores –recuerde que nadie sabe exactamente cuántos son ni cuánto cobran ni cómo-, que tienen con prestamistas por unos 33 mil millones de devaluados pesitos.
– No es un rescate, porque para ello tendrían que estar en cartera vencida. Es una reducción en el Costo Anual Total (CAT) de los préstamos-, dice Jorge Estefan Chidiac, director general del Banco del Ahorro Nacional y Servicios Financieros (Bansefi).
“A los maestros les cobran de interés hasta 188 por ciento, según Condusef, y en el sector magisterial, 60 por ciento”, añadió y aclaró que es un crédito de Bansefi, mediante Nafinsa, que no se utilizarán recursos fiscales y que el banco pagará a las Sofomes o a la entidad financiera o comercial, como Chedraui, que hayan prestado a los maestros y, luego, se les cobrarán menos intereses, con la misma deuda.
Los dirigentes sindicales, encabezados por Díaz, quien ya ni se acuerda de Gordillo, serán quienes tramiten todo. Intermediarios que, obvio, venderán caro su favor a los endeudados y consentidos profesores.
¿Y por qué no rescatar a cualquier otro trabajador? A un albañil, a un vendedor de colchas en abonos o tandas, a un periodista, a un empleado de oficina?
Pus porque no están en un sindicato que representa políticamente la estabilidad en las aulas pero, más que en éstas, en las calles.
La Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) lleva seis meses en el Distrito Federal y cuando se conoció que recibió cien millones de pesos en uno de tantos acuerdos fallidos en la Secretaría de Gobernación (Segob) estalló un escándalo impresionante, que condenó a esos ciertamente rijosos y disidentes maestros al estereotipo de cuasi subversivos y guerrilleros.
Es un premio por buena conducta. Sin duda.
Michoacán, ¿qué hacer?
El Partido Acción Nacional (PAN) en el Senado se pronunció de nuevo por la desaparición de poderes en Michoacán. Jesús Reyna, balconeado por las autodefensas, que le acusan de reunirse con Los Caballeros y de pactar con ellos –como un caballero, claro-, a su paso por el gobierno de Michoacán, donde fue interino de su patrón, Fausto Vallejo Figueroa, dice que el estado es un paraíso.
En la fosa clandestina hallada en La Barca, Jalisco, frontera entre Bellavista y Ocotlán, ya son 37 cuerpos encontrados. Y eso que el crimen va a la baja.
Jesús Murillo Karam, procurador general de la República, lanzó una advertencia que hemos escuchado desde el calderonismo: las autodefensas no se extenderán “y eso lo garantiza el Estado”.
-La facultad que tiene el Senado es para cuando han desaparecido los poderes, no para desaparecerlos-, dijo Murillo y razón no le falta.
¿Recuerda al histrión Fernando Gómez Mont, secretario de Gobernación con Calderón, cuando a grito abierto desafió al crimen?
– Señores, los estamos esperando; métanse con la autoridad y no con los ciudadanos- dijo. Desde entonces, se han escuchado discursos reiterativos, en los que se asegura que la paz volverá a Michoacán, pero la realidad es contundente: el estado vive una guerra civil.
El PAN en el Senado pidió la desaparición de poderes -¿cuáles, si ya no existen?-, como salida única. Ya lo había dicho, pero su posición retomó fuerza.
– De ninguna manera creemos que sea la salida, contestó el secretario de Gobernación, Miguel Angel Osorio… y reiteró lo ya escuchado: el Estado se encargará de la seguridad.
“Lo que el presidente quiso decir”
Eduardo Sánchez, subsecretario de normatividad y medios, es vocero presidencial desde ayer. Se encargará de coordinar la política de comunicación social y de unificar criterios y posiciones.
Su llegada trae a la mente, inevitablemente, a Rubén Aguilar, vocero de Vicente Fox, famoso por su frase: “Lo que el presidente quiso decir”, ya que a diario enderezaba la plana, después de las locuaces declaraciones del guanajuatense.
Consejeros agonizantes
El lunes habrá reglas para la elección de los cinco consejeros del agonizante Instituto Federal Electoral (IFE). Cuando menos así lo promete Silvano Aureoles Conejo, presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) de la Cámara de Diputados.
Según el michoacano, de entre sesenta candidatos y Francisco Fernández Santillana –finalista del proceso interrumpido para suceder a Sergio García Ramírez-, saldrá el primer corte, previo acuerdo de las siete fracciones.
Y como en los concursos de belleza, tras la pasarela se tendrán los cinco nombres. Estos consejeros tendrán vida artificial, porque con la reforma político-electoral, el IFE morirá oficialmente y surgirá el Instituto Nacional de Elecciones (INE). Puro choro nomás para marear, enredar y mantener al club de Tobi.
Y la reforma político-electoral, de la que es parte el INE, no salió esta semana. “Se va a proponer a la Junta de Coordinación Política sesionar martes, miércoles y jueves igual que la siguiente semana”, dijo Emilio Gamboa, coordinador de los senadores del PRI. Y es que debe estar lista máximo al concluir noviembre, porque viene la energética.
Jorge Luis (Des) Preciado, coordinador de los legisladores del PAN, secunda la posición tricolor: ya hemos discutido todo y sólo falta que se vote.
Patoaventura
Es la del colombiano John Jairo Guzmán, rata de dos patas confesa, quien dice que escapó de sus captores en Toluca, Estado de México, y que –ojo- pidió dinero a unos agentes federales que, tan bondadosos y generosos, le dieron cincuenta varos con los que pagó un boleto de autobús a la capirucha.
Ya aquí, pidió un raite a un taxista a la embajada colombiana, donde se refugió y huyó.
Aquí hay gato encerrado y no hace falta ser perito para darse cuenta.
Cuento chino, el caso JFK
Con motivo del primer tostón del asesinato de John F. Kennedy y sin pretender hacerle al Sherlock Holmes o al experto en armamento, me cae que con los rifles que había en 1963 y desde la ventana donde dicen que Lee Harvey Oswald disparó al presidente demócrata, suena a cuento gringo.
¿Ha visitado usted alguna vez el museo The Sixth Floor Museum en la Plaza Dealey en la famosa Elm Street, esquina con Houston, en Dallas, Texas?
Si no, le platico:
En una esquina del sexto piso de lo que fuera un depósito de libros está la ventana desde donde disparó con una escopeta el dizque asesino.
Creer que Oswald mató a Kennedy es como creer en el Nintendo del extinto Jorge Carpizo, en el asesinato del cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo o en que Mario Aburto es el único y auténtico asesino de Luis Donaldo Colosio. Buenos chistes.
Vámonos, con Juanga cantando Las Mañanitas a Nicolás Maduro.
¿Pero qué necesidad?, como dijera él mismo.