TOLUCA, Méx. –La Zona Metropolitana del Valle de México (ZMVM) podría evitar dos mil 300 muertes al año, si tan sólo redujera los niveles de contaminación del aire, problemática que se traduce a largo plazo, en 10 mil 500 defunciones de mayores de 30 años, como consecuencia de enfermedades provocadas por los agentes contaminantes que se respiran todos los días, afirmó en la Universidad Autónoma del Estado de México, el especialista José Luis Texcalac Sangrador.
Durante su participación en el Primer Curso-Taller Enfoques Ecosistémicos en Salud, organizado por la Facultad de Medicina de la Máxima Casa de Estudios mexiquense, Texcalac Sangrador afirmó que las zonas con mayor concentración de partículas dañinas en el aire en el Estado de México se encuentran en los municipios de Valle de Chalco, Huixquilucan, Ixtapaluca, Jalatlaco, Jilotzingo, Naucalpan, Ocoyoacac y Chimalhuacán.
Ante especialistas de todo el país que se dieron cita para analizar conocimientos del área de la salud pública y el cuidado del medio ambiente, el investigador en Ciencias Médicas del Instituto Nacional de Salud Pública precisó que en el Distrito Federal, las delegaciones con mayor afectación son Benito Juárez, Cuauhtémoc, Iztacalco, Iztapalapa y Miguel Hidalgo.
El experto explicó que algunos de los factores que vulneran más a los ciudadanos de la región son el nivel socioeconómico y sus condiciones de pobreza -pues el contacto con partículas contaminantes en esta situación es frecuente-, así como su estatus nutricional.
Patologías en el sistema respiratorio y el deterioro del sistema inmunológico, además de problemáticas cardiovasculares, afirmó, son las consecuencias de la exposición a un aire con excedente de agentes contaminantes, sostuvo el especialista.
Ante tal panorama, José Luis Texcalac Sangrador enfatizó la importancia de modificar las normas y estándares permitidos en nuestro país, a los niveles de la Unión Europea y la Organización Mundial de la Salud (OMS) para la aplicación de contingencias ambientales.
Por último y al plantear diversas propuestas, el experto sugirió desarrollar de manera periódica, evaluaciones de impacto de la contaminación en la salud pública, por ejemplo, cada cinco años, y concretar un Comité Científico de expertos para que realice estos análisis.
De igual forma, consideró Texcalac Sangrador, deben fortalecerse los sistemas de bases de datos de egresos hospitalarios, en el entendido de que con esa información se identifiquen y generen mediciones sobre las zonas de mayor riesgo y así, aplicar estrategias de vigilancia sanitaria.