Después de cuatro cirugías de espalda, cinco procedimientos quirúrgicos en la rodilla izquierda y en el Tendón de Aquiles, el golfista estadounidense Tiger Woods confesó que correr 30 millas a la semana en los principios de su carrera, destrozaron su cuerpo.
Así lo reveló el jugador norteamericano a GolfTV en una entrevista, en la que narró que como parte de su preparación física corrió demasiado, lo que afectó gravemente sus rodillas y la columna vertebral.