ESTADO DE MÉXICO, Méx.- En acciones diferentes y resultado de los patrullajes que se realizan en la entidad mexiquense para inhibir actos ilícitos, elementos de la Secretaría de Seguridad (SS) detuvieron a dos sujetos por su probable participación en el delito de robo con violencia a transeúnte.
El primer caso se suscitó mientras efectivos de la SS patrullaban sobre la calle Hortensia, esquina con Azucena, en la colonia Rancho San Rafael, en el municipio de Tlalnepantla donde se percataron que un grupo de ciudadanos solicitaba apoyo, mientras sometían a un individuo.
Al aproximarse, un vecino mencionó que el sujeto que estaba siendo golpeado, minutos antes lo había amagado con una navaja para despojarlo de sus pertenencias, por lo que solicitó el auxilio de las personas que se encontraban en el lugar. Acorde al protocolo, los uniformados intervinieron de inmediato.
Con la situación controlada, los oficiales de la SS llevaron a cabo una revisión; entre las pertenencias del sospechoso, localizaron una navaja de aproximadamente nueve centímetros de largo y un teléfono celular.
El segundo caso tuvo lugar en el municipio de Capulhuac, donde policías estatales junto con integrantes de la Policía Municipal de esta demarcación, atendieron al llamado de auxilio de un poblador, quien refirió que momentos antes un sujeto lo amedrentó con un arma de fuego para despojarlo de su teléfono celular.
Enseguida, los integrantes de ambas corporaciones implementaron un operativo de búsqueda, el cual culminó sobre la calle Niños Héroes esquina con Ignacio Zaragoza, donde observaron a un sujeto con las mismas características descritas por la víctima, quien además actuaba de manera sospechosa.
Mediante comandos verbales los uniformados solicitaron al individuo detener la caminata para efectuar una revisión apegada al protocolo de actuación; al concluir, hallaron entre sus pertenencias una réplica de arma de fuego y un teléfono celular.
En ambas intervenciones, a los detenidos identificados como Carlos “N” de 38 años y Juan “N” de 18 años, respectivamente, se les dieron a conocer los derechos que confiere la ley y posteriormente fueron trasladados junto con los objetos confiscados ante la Agencia del Ministerio Público correspondiente, a fin de resolver su situación jurídica.