CIUDAD DE MÉXICO, Méx.- En el marco de la Estrategia Nacional Antisecuestro y como resultado de la coordinación entre las Unidades Especializadas Contra el Secuestro de los 31 estados y del Distrito Federal, así como con las instituciones de seguridad del Gobierno de la República, en el período de enero a noviembre de 2015 se registró una disminución de 27.77% en el comportamiento de la incidencia de este ilícito, en el que se contabilizaron 947 averiguaciones previas o carpetas de investigación.
Lo anterior representa 364 secuestros menos respecto a los casos registrados de enero a noviembre de 2014, período en el que las Fiscalías y Procuradurías Generales del país atendieron 1,311 casos.
Por lo que corresponde al mes de noviembre en específico, las cifras del Secretariado Ejecutivo de Seguridad Pública refieren que en 2014 se presentaron 102 casos, mientras que en noviembre de 2015 se contabilizaron 90 secuestros, lo que refleja una disminución en la cantidad de averiguaciones previas o carpetas de investigación iniciadas de 11.76%, es decir, 12 casos menos.
Estas acciones se desarrollan en el marco de una estrecha colaboración entre la Coordinación Nacional Antisecuestro (CONASE) con las dependencias del Gabinete de Seguridad, la Secretaría de Marina Armada de México, la Secretaría de la Defensa Nacional, la Comisión Nacional de Seguridad, la Policía Federal, el CISEN, la Procuraduría General de la República y las Fiscalías y Procuradurías Generales de los estados, así como del Distrito Federal.
El trabajo conjunto es permanente, prueba de ello es el Programa Integral de Capacitación que la CONASE mantiene vigente con las Unidades Especiales Contra el Secuestro en el país. En días pasados concluyó el curso de la 4ª Generación, que durante 212 horas distribuidas en cinco semanas, se enfocó a la especialización de 121 investigadores, entre Ministerios Públicos, Policías Ministeriales y Peritos de 10 estados, en temas de investigación y persecución del secuestro.
El Gobierno de la República refrenda su compromiso para disminuir a su mínima expresión el delito de secuestro, trabajando de manera coordinada con los gobiernos estatales en la investigación y persecución de quienes se separen de la legalidad y colaboren con organizaciones dedicadas al flagelo social que representa el secuestro, y para la reconstrucción del tejido social.