Manlio Fabio Beltrones Rivera fue expulsado ayer de la bancada del PRI en el Senado.
El ex gobernador de Sonora, senador, diputado y líder del Partido Revolucionario Institucional (PRI) miente y engaña.
Se dice indignado por lo que sucede en el partido, en el que Alejandro Moreno Cárdenas fue reelecto el domingo por la tarde como dirigente nacional, hasta 2028 y con posibilidad de quedarse hasta 2032, pero no platica, por ejemplo, que es senador electo gracias a que el líder del partido aceptó darle la candidatura después de rogarle, de, literalmente, llorarle al asegurar que era un perseguido político y que necesitaba el fuero para defenderse.
A Beltrones Rivera le fueron hallados 10.4 millones de dólares en Andorra, en una cuenta a nombre de su hija, Sylvana Beltrones, actualmente senadora del tricolor.
Sylvana ingresó esa cantidad de dinero -unos 190 millones de devaluados, pero útiles pesos- cuando tenía 26 años y no ocupaba ningún cargo público. Manlio era el coordinador de los senadores del PRI.
El sonorense se dice perseguido pero no menciona esos detalles que muestran su real personalidad y su doble moral.
Ha sido investigado, además, en Estados Unidos por presuntos nexos con el narcotráfico.
-Esta es una decisión arbitraria. Tengo muy claro que tengo a salvo mis derechos políticos y electorales. Lo más importante es que el PRI no se quede paralizadao en sus fobias. Que el PRI regrese a su normalidad democrática, dijo en un video en redes
Hoy, fuera de la bancada, podrá sumarse al grupo parlamentario que desee y será, sin duda, uno de los tres votos que harán falta a Morena y rémoras -PT y Verde- para alcanzar la mayoría calificada en el Senado, que hoy no tiene.
El Instituto Nacional Electoral (INE) y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federacion (Trife, pa’ más fácil) se perfilan a aprobar el triunfo de Claudia Sheinbaum Pardo en la elección presidencial del 2 de junio y la mayoría calificada -dos terceras partes de los legisladores en ambas cámaras- pese a que la oposición y expertos en materia electoral y derecho han dicho en reiteradas ocasiones que es ilegal y que se viola la Constitución.
Se enreda el caso Mayo Zambada y Sinaloa, el narcoestado
La Fiscalía de Sinaloa reveló ayer un video en el que se observa la camioneta en la que presuntamente viajaba el empresario, ex alcalde de Culiacán y ex rector de a UAS, Héctor Melesio Cuén Ojeda, asesinado ese mismo día, presuntamente cargando gasolina en una estación.
Llegan dos sujetos en una motocicleta, se baja uno, abre la puerta del copiloto y dispara a quemarropa. pero no se observa, no se distingue, si en la camioneta viaja Cuén Ojeda.
Es la noche del 25 de julio de este año, el día que El Mayo Zambada asegura en su carta se reuniría con el gobernador Rubén Rocha Moya y con Héctor Melesio Cuén Ojeda, en un rancho de la región.
Pero el gobernador dice que estaba en Los Ángeles, California. Qué casualidad que justo el día que suceden los hechos, el señor no estaba.
Por cierto, utilizó un avión privado para viajar.
¿Y la austeridá republicana que presume su cómplice Andrés Manuel López Obrador?
El Mayo dijo en su misiva que el funcionario fue eliminado ahí mismo y no, como dice el gobierno estatal, en un intento de robo de vehículo.
Y, efectivamente, suponiendo sin conceder -argumento de abogado- que el ex rector de la UAS haya ido a bordo de la camioneta -porque no se observa-, el capo del cártel de Sinaloa mintió en su carta.
Falta mucha historia, porque no aparece José Rosario Heras López, policía de investigación del gobierno de Sinaloa que era escolta de Ismael El Mayo Zambada.
La fiscalía confirmó que Heras López es agente de la dependencia, pero no da más datos.
Claudia Sheinbaum, inminente presidenta de México, se apresuró a decir “ya se aclaró ayer”, como si no supiera que deben agotarse as indagatorias para conocer la verdad científica y saber si Rocha Moya es inocente.
Fue una auténtica avalancha morenista, porque los gobernadores de ese partido publicaron una carta abierta, adelantándose también a los resultados que arroje la investigación.
Lo cierto es que el documento confirma lo que se conoce desde hace lustros: en Sinaloa, como en muchos otros estados de México, no se mueve un alfiler sin la autorización del narcotráfico.
Vámonos: Y los que faltan (expulsiones del PRI).
alberto.montoya@diahabil.com.mx @albermontmex