Según los resultados del Plan Nacional para las Evaluaciones de los Aprendizajes (Planea), que por primera vez se aplicó en el país y que sustituye a la prueba ENLACE, ocho de cada diez alumnos que terminaron el bachillerato, tienen serias dificultades para resolver operaciones aritméticas complejas.
Resultados de la misma prueba revelan que el 50% de egresados de bachillerato son incapaces de realizar operaciones con fracciones o porcentajes. Mientras que la mitad de los alumnos que terminaron se quedaron en el nivel I de matemáticas: sólo saben multiplicar o sumar con números enteros, y 43.3% es incapaz de comprender información implícita en un texto, reveló la Secretaría de Educación Pública (SEP).
El subsecretario de Educación Media Superior, Rodolfo Tuirán, y el subsecretario de Planeación y Evaluación de Políticas Educativas, Javier Treviño Cantú, dieron a conocer los resultados de la prueba Planea, que por primera ocasión se realiza en sustitución de ENLACE.
Tuirán alertó que esos alumnos con bajo nivel de aprendizaje enfrentarán problemas de ausentismo y eventualmente de abandono escolar en la profesional.
Mientras que Treviño Cantú destacó que sólo 6.4% obtuvo el nivel más destacado, sabe leer e interpretar gráficas.
Treviño Cantú informó que en comprensión lectora, 36% de los alumnos dominan los conocimientos y habilidades que deben tener al concluir el bachillerato, es decir, que son capaces de relacionar información explícita e implícita en los textos para elaborar conclusiones simples y saben reconocer el tema central.
En matemáticas, sólo 18.8% de los alumnos que terminaron el bachillerato lograron obtener los niveles más altos, es decir, que apenas dos de cada diez resuelven problemas planteando ecuaciones, saben extraer información de tablas o gráficas para resolver problemas y realizan cálculos con razones y proporciones.
De todos los estudiantes evaluados, sólo 6.4% obtuvo el nivel más destacado, es decir, que esa mínima proporción sabe leer e interpretar gráficas, además de evaluar el entorno e integrar los datos obtenidos mediante diferentes procedimientos matemáticos para contrastarlos con situaciones reales.
Esos bajos resultados, admitió Tuirán, en un largo plazo van a repercutir en el ámbito profesional y familiar, porque los alumnos que terminen el bachillerato con bajo desempeño y busquen un empleo, conseguirán puestos con menor nivel salarial que quienes lograron resultados destacados.