Candidatos duplicados. Aspirantes que no aparecen. Algunos que no ganaron en la tómbola, pero sí están en la lista. O los que no aparecen, pero sí ganaron. Y los más, que no tendrían por qué estar si no cumplían con los requisitos, pero sí están porque son amigos, compas, camaradas, cercanos -como ellos llaman a la zalamería y al nepotismo- a la fracasada cuarta transformación y a Morena.
Al menos hay 15 nombres que aparecían en la primera lista y ya no están. Así, desaseada, hedionda un auténtico cochinero -como las elecciones en el extinto PRD, de donde emigró la mayoría de Morena- será la elección de jueces, magistrados y ministros el 1 de junio próximo… ideada por Andrés Manuel López Obrador para apoderarse del Poder Judicial. Más de 4 mil nombres de candidatos a las votaciones que inventó un tipo resentido, en venganza porque su candidata a la presidencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Yasmín Esquivel Mossa, se cayó cuando se conoció su plagio de las tesis para licenciatura en Derecho por la UNAM y de doctorado en la Anáhuac.
De ahí su odio a Norma Lucía Piña Hernández, quien se quedó con la presidencia de la Corte y, desde ahí, contuvo las locuras, las ocurrencias del tabasqueño. El listado -segundo, tras correcciones que hizo el Senado- fue publicado el domingo pasado por el Instituto Nacional Electoral (INE) en su sitio web, pese a que aún presentaba irregularidades, porque el tiempo está encima.
Sí, porque, en concreto, quedan sólo unas horas para cualquier fe de erratas, ya que el 20 de febrero -pasado mañana- deberán enviarse a imprimir ¡6 millones de boletas! Así tendrá que ser el proceso, con todas las triquiñuelas, trampas y, ¿por qué no?, errores reales.
El INE se deslindó de la responsabilidad de hacer cualquier corrección e hizo un llamado a los candidatos para que revisen las listas y que pidan una rectificación en caso de que detecten un error. Guadalupe Taddei, presidenta del INE, justifica las irregularidades del proceso y de las listas enviadas por el Senado, porque, dice, es la primera vez que México lleva a cabo un proceso así.
¿Pero de dónde salieron esos nombres? ¿Quiénes los agregaron o excluyeron y por qué? En el caso de la Suprema Corte, el número de ministros bajará de 11 a 9 y sólo tres, las alineadas con López Obrador, participarán en la puesta en escena.
Yasmín Esquivel Mossa, esposa de José María Rioboó, contratista y consejero preferido del tabasqueño. Loretta Ortiz Ahlf, propuesta por López Obrador y fundadora de Morena, viuda de José Agustín Ortiz Pinchetti, quien era amigo del que se fue a La Chingada, su rancho en Chiapas.
Y, por supuesto, la señora de los lavaderos, Lenia Batres Guadarrama, exhibida en un video mentando madres y en el que llama a su vecina “hija de su reputísima madre” por un chisme de vecindad en el que participa su hijo, Emiliano Batres Guadarrama, cuyo padre es el también becado ex fiscal interino de la capital del país, Ulises Lara López, La señora de los lavaderos tendrá la renta asegurada hasta 2038.
El 1 de junio próximo se renovarán 386 cargos de jueces y 464 magistraturas, además de la SCJN, que se reducirá de 11 a 9 integrantes. Y todo por berrinche de López Obrador y porque Claudia Sheinbaum no es capaz de desobedecer. Perdón, “de oponerse a cualquier proyecto o plan del presidente Andrés Manuel, porque pensamos lo mismo”, ha dicho Sheinbaum Pardo, la ex integrante del CEU en la UNAM.
Vámonos: Se agota el plazo de Trump y no se ven avances de Claudia Sheinbaum contra el narco y los migrantes. ¿Otro placesito de colchón?
alberto.montoya@diahabil.com.mx @albermontmex