TOLUCA, Méx.- Para prevenir daños, brindar seguridad a los pacientes e identificar reacciones adversas de los medicamentos, el Centro Médico “Lic. Adolfo López Mateos” del Instituto de Salud del Estado de México (ISEM), ha enviado 125 reportes al Centro Estatal de Farmacovigilancia, en lo que va del año.
El director general de este nosocomio, José Rogel Romero, aseguró que son la instancia de la entidad que mayor número de reportes envía, lo que beneficia a los pacientes, pues garantiza una mayor vigilancia en los medicamentos que receta el especialista.
“Si hay un medicamento que esté causando ardor estomacal, puede haber un método de prevención como que se tome con alimentos o después de ellos y de esa manera se pudiera contrarrestar el malestar”, dijo.
Refirió que los medicamentos más reportados son: paracetamol, tramadol, cetraxona y ciprofloxacino, dos analgésicos y dos antibióticos; y las manifestaciones que más causan son dermatológicas y gastrointestinales
“No se trata de satanizar a ningún medicamento, sino buscar la seguridad del paciente identificando las reacciones adversas para que al momento de que el médico los recete brinde alternativas en el tratamiento”, abundó.
Por su parte, la jefa de Farmacia de este nosocomio, Katia Bustamante Ríos, refirió que el control de las reacciones adversas se logró luego de la creación de una Unidad de Farmacovigilancia y la capacitación del personal médico.
“Los trabajadores de salud de este Centro Médico sabe que una vez que identifican un evento adverso que se desarrolle por medicamentos en los pacientes tienen la obligación de informarlo, ya sea vía telefónica o por escrito”, indicó.
Abundó que también se han brindado pláticas a los pacientes de consulta externa, a quienes se les informa sobre la importancia de la farmacovigilancia y se les pide que estén atentos por si se presenta alguna reacción al momento de tomar el medicamento indicado.
Resaltó que una vez que se recopilan los datos de las reacciones en el paciente, se hace un procedimiento para poder identificar la causalidad que está ocasionando la manifestación con el medicamento, se concentra en una base de datos y la información se emite al Centro Estatal de Farmacovigilancia, quien a su vez lo envía al Centro Nacional y posteriormente a la Organización Mundial de la Salud (OMS).