VALLE DE MÉXICO.- El cantautor español, Joaquín Sabina, dijo que estaba dispuesto a hablar de todo menos del presidente Felipe Calderón, en su más reciente visita a México, pero subrayó “México es un país que está al borde del abismo”.
Al llegar a México para realiza su gira “El penúltimo tren”, que incluye diez conciertos en diferentes ciudades, entre ellas Monterrey, el autor de “Y nos dieron las diez” recordó “la otra vez me metisteis en un lío y no voy a meterme otra vez”, bromeó al recordar que en su anterior visita a México tuvo un conflicto con el mandatario mexicano.
En aquella ocasión declaró a los medios que Calderón había sido “muy ingenuo” por plantarle la batalla al narcotráfico y el gobernante -admirador confeso de su música- le escribió una carta y lo invitó a comer a la residencia presidencial de Los Pinos.
El canta autor español afirmó “soy una persona bien nacida y educada y si me invitan a comer voy, pero lo que no hago es cambiar de opinión. Después de la comida seguía teniendo la misma opinión, aunque nos dieron muy bien de comer y hubo un mariachi excelente”, apuntó.
Y remató “México es un país que está al borde del abismo, si no pisándolo ya, en cuanto a la infiltración del narco en todos los sistemas y por la insoportable violencia. No creo que se pueda seguir así mucho tiempo”, expresó. Así, en su opinión, la fórmula para solucionarlo es “que se legalicen absolutamente las drogas aquí y que se prohíban absolutamente las armas” en Estados Unidos.