El bloqueo, quema de mobiliario y un vehículo de seguridad, así como la agresión y robo a los vigilantes en Ciudad Universitaria por parte de los ocupantes del auditorio Justo Sierra en Ciudad Universitaria, obligan a exigir su desalojo inmediato y a debatir de nuevo la mal entendida autonomía de la UNAM.
La expulsión de esos grupos, que tienen el control desde el paro de 1999 encabezado por el Consejo General de Huelga (CGH) -con Alejandro Echevarría El Mosh a la cabeza-, que se oponía al aumento y a la obligatoriedad de las cuotas de inscripción promovidos por Francisco Barnés de Castro, no puede ni debe posponerse más, pero ¿se atreverá el nuevo rector Enrique Graue Wiechers?
La detención el miércoles por la noche en Avenida Universidad de Jorge Emilio Esquivel El Yorch, integrante del llamado colectivo Okupa Che, que ha invadido el auditorio, con al menos 50 grapas de cocaína, lo que originó las protestas, hace impostergable su salida.
Juan Ramón de la Fuente y José Narro Robles no pudieron ni quisieron deshacerse de esos grupos y hoy la UNAM y los estudiantes pagan las consecuencias. Casi dos décadas de impunidad y de permitir el consumo y tráfico de droga y la invasión de un inmueble propiedad de la máxima casa de estudios.
La Universidad no es ajena a la violencia y criminalidad que azotan al país. Su autonomía no significa extraterritorialidad ni ser una especie de nación independiente, pero no ha quedado claro.
Por miedo a una respuesta de esos grupos, Okupa Che, principalmente, que se dicen defensores de la equidad de género, la igualdad, la democracia, la libertad y la intelectualidad, no han sido tocados y sólo han sido emitidos comunicados faltos de fuerza.
La UNAM presentó una denuncia ante la Procuraduría General de la República (PGR) por las agresiones a los vigilantes, robo y el daño al patrimonio universitario y, como ha sucedido desde su invasión, exigió su entrega, pero nadamás.
El sitio ha estado ocupado por esos fósiles que se dicen anarquistas y que, incluso, se han enfrentado con estudiantes, primero, y con otros grupos de supuestos universitarios. En 2014 hubo un tiroteo por un supuesto robo de celular.
Cierto que en la UNAM y, en general, en las escuelas públicas, IPN, UAM o cualquier otra, los directores han utilizado y fomentado a los llamados porros, a los que, incluso, tienen a sueldo.
También es verdad que quienes gustan de fumar mariguana –sólo con fines lúdicos, por cierto– y de meterse alguna otra sustancia adictiva –el alcohol y el tabaco también lo son–, existen y existirán siempre ahí.
Pero de eso, que tampoco es legal, a tener en los planteles bandas de traficantes de droga y de malandrines hay una diferencia abismal.
Los estudiantes de la Universidad, izquierdosos y revolucionarios por naturaleza, han tenido siempre refugios, cubículos donde se reúnen, editan pasquines presuntamente analíticos y críticos, y mantienen el control de todos los movimientos en los planteles, ya sean facultades, CCHs o preparatorias.
Inseguridad y vendedores de todo
La situación en la UNAM es complicada. La inseguridad, principalmente, es un problema y grave y no es exclusivo de Ciudad Universitaria.
La FES Acatlán, la FES Iztacala, la FES Cuautitlán y la FES Aragón están plagadas de vendedores ambulantes ¡en sus pasillos!
Sí, la libertad de expresión como bandera para permitir abusos e impunidad.
No bastan las tiendas y cafeterías formales que existen en todas.
¿Quién o quiénes les han dado permiso de adueñarse de las instalaciones universitarias? ¿A cambio de qué las han convertido en mercados?
Sus pasillos y explanadas están invadidos.
Circula droga y las advertencias en sus diversos campus son alarmantes. Por ejemplo, en la FES Iztacala se lee: ?–Procura no caminar solo o sola al anochecer.?–Si detectas a alguien en actitud sospechosa, denúncialo
La comunidad universitaria exige la salida de esos vándalos y esta coyuntura debe aprovecharse para sacarlos, para expulsarlos y para encarcelarlos.
La UNAM debe mejorar su sistema de seguridad y restringir el acceso a sus instalaciones, aunque protesten esos grupúsculos.
Barda o reja perimetral, credenciales electrónicas y registro e identificación de visitantes deben implementarse ya, principalmente en CU donde el acceso es prácticamente ilimitado.
Y como ejemplo, ahí está la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM). Ayer se recibió otra amenaza de bomba en su plantel Xochimilco.
Son ocho en el año y dos en la semana. ¿Y las autoridades? Bien, gracias.
Agoniza el PRD
El Partido de la Revolución Democrática (PRD) se perfila a la extinción.
La guerra de tribus que vive y su entreguismo al gobierno priísta desde el improductivo Pacto por México los tienen en el fondo de una barranca tan profunda y aterrante como la de Cocula, Guerrero, donde presuntamente quemaron a los 43 normalistas de Ayotzinapa… levantados enm Iguala.
Estado y municipio gobernados por el perredismo.
Agustín Basave, dirigente nacional que la pandilla Los Chuchos o Nueva Izquierda puso y maneja cual marioneta, navega con bandera de no rompo un plato, cuando se echa toda la vajilla, y tiene al partido peor que como lo recibió del nefasto Carlos Navarrete Ruiz.
Oaxaca los exhibió de nuevo, con la fractura entre el perredista de corazón priísta, José Antonio estafan (perdón Estefan) Garfias, y Benjamín Robles Montoya.
Entre gases lacrimógenos, madrazos, mentadas, jalones y arañazos, Los Chuchos y el gobernador Gabino Cué, otro mediocre, acomodaron a Estefan, pese a que el favorito era Robles, quien se irá del partido como acostumbran todos los que se quedan sin hueso.
El más feliz, por supuesto, es Alejandro Murat, candidato del PRI.
Le hacen la campaña. Y gratis.
Fox, como el zorrillito Cuchi Cuchi
Locuaz e ignorante, el ex panista por conveniencia Vicente Fox Quesada se tiró a matar contra Donald Trump, inminente candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos.
Tirado al piso con el PRI y con Enrique Peña Nieto desde la campaña de 2012, cuando llamó a votar por él y no por la panista fracasada Josefina Vázquez Mota, el ex presidente vuelve a dar la cara y se avienta el tiro de enfrentar a Trump, lo que nadie del gobierno peñista ha hecho.
Al menos no como él.
– I’m not going to pay for that fucking wall (Yo no voy a pagar por ese pinche muro). Que lo haga él. El es el que tiene el dinero, dijo Fox en entrevista en inglés con Jorge Ramos, periodista mexicano que trabaja en Univisión.
Y que reacciona el del peluquín, exigiendo una disculpa y amagando con meterle tres metros más de altura al pinche muro (Fox dixit).
Con o sin acuerdo, el botudo desempeña su rol: sirve al gobierno federal, que no se enfrenta directamente con Trump y se remite a echarle indirectas, por si gana.
Entonces, el priísmo tendrá pretexto y argumento:
– Fue Fox, no nosotros, amigo Trump.
El gobierno nos traicionó: Mireles
José Manuel Mireles Valverde ya perdió la fe.
Después de rogar, de implorar y hasta humillarse ante el gobierno federal para que le libere y ser ignorado, modificó la estrategia y volvió a la ofensiva.
El médico de profesión llamado El Doctor de la Mirada Fría, acusó ayer al gobierno federal de traicionar a los fundadores de las autodefensas en Michoacán, claves para combatir al crimen organizado y los abandonaron.
Mientras, Alfredo Castillo Cervantes, ex virrey de Michoacán y quien le usó a modo, está becado en la Conade. Y el hijo del priísta Fausto Vallejo, Rodrigo Vallejo El Gerber, anda libre pese a sus nexos con Servando Gómez La Tuta, jefe de Los Caballeros Templarios.
Vámonos: Denisse Ugalde, alcaldesa de Tlalnepantla, quiere cerrar el Deportivo Tlalnepantla. ¿Qué pretende la hija de Arturo Ugalde?
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