NAUCALPAN, Méx.- La fe mueve montañas, conquista imperios y construye templos que prevalecen durante siglos. Luego del sometimiento de la gran Tenochtitlan por Hernán Cortés, el 13 de agosto de 1521, el siguiente paso fue la evangelización de los nativos del nuevo territorio de la Corona Española, proceso que fue conocido como la “Conquista por la Cruz”.
Tal encomienda fue llevada a cabo por la Orden Franciscana, la cual fundó el Convento de San Gabriel en Tlacopan, actualmente Tacuba, de donde partieron los frailes que se encargaron de evangelizar los pueblos originales de lo que hoy es nuestro municipio, entre ellos los que hacen referencia a las cuatro casas del significado de Naucalpan: Totolinga, Huitzilacasco, Totoltepec y Tlatilco.
Una vez evangelizados, sus nombres cambiaron agregándoles una advocación católica: San Lorenzo a Totolinga, San Esteban a Huitzilacasco, San Juan Bautista a Totoltepec y San Luis a Tlaltilco, santos cuyas virtudes eran similares a los dioses que adoraban los nativos de esos lugares.
Un camino similar siguieron San Mateo Nopala, Santiago Occipaco, Santa Cruz Acatlán, Santa María Nativitas y San Francisco Chimalpa, entre otros pueblos, para consolidar la fe católica en la región.
La iglesia colonial más conocida en el municipio es el Santuario de la Virgen de Los Remedios, en parte por la majestuosidad de la hoy Basílica, y otro tanto por la leyenda que enmarca su origen.
Un soldado de Hernán Cortés que huía de los aztecas, escondió una imagen de la virgen en el cerro de Otomcapulco. Ya consolidada la dominación española, en 1540, gracias a una revelación mística, fue encontrada por un cacique indígena convertido al catolicismo, quien recibió la instrucción divina de que se le construyera un templo a la Virgen de los Remedios en ese preciso lugar.
En su mayoría, las iglesias que se edificaron en el Siglo XVI en nuestro municipio, fueron pequeñas capillas, primero provisionales, construidas con materiales perecederos y posteriormente con piedra. En San Bartolo, San Francisco Chimalpa y Los Remedios, los templos tienen mayores dimensiones.
No existe fecha precisa de construcción de las primeras capillas, pero debido al estilo sobrio debieron realizarse durante las décadas de 1530 o 1540. En algunos sitios, como San Lorenzo Totolinga, Santiago Occipaco, Santa Cruz del Monte y San Mateo Nopala, aledañas a los templos coloniales se han construido modernas iglesias donde hoy se brindan los servicios religiosos.
En los tres primeros casos, las antiguas edificaciones permanecen abiertas para la oración, en tanto, la de San Mateo, se encuentra cerrada y ha tenido reparaciones sin el cuidado de preservar el estilo.
Naucalpan es famoso por su industrialización, siendo uno de sus íconos más importantes las Torres de Satélite. Pero a unos pasos de esa ciudad moderna, podemos encontrar una de varias puertas para viajar a La Colonia.