La izquierda en México vive el momento más crítico desde que Cuauhtémoc Cárdenas quedó en un pobre y lejano tercer lugar en la elección presidencial de 2000, precisamente la que marcó la derrota del PRI con Francisco Labastida Ochoa y el encumbramiento de doce años del PAN con el triunfo de Vicente Fox.
Es más, ni el cochinero de 2008 en la elección de dirigencia nacional entre Alejandro Encinas y Jesús Ortega fue tan amenazante para el sol azteca como la fractura de hoy.
Mientras Los Chuchos, Los Amalios, Los Bejaranos y los que nadan de a muertito -Marcelo Ebrard y Miguel Angel Mancera-, buscan en el techo la respuesta como escolapios en examen de matemáticas, Andrés Manuel López Obrador les gana terreno y, en apenas tres meses, llevó a cabo sus 32 asambleas estatales, busca afiliar a un millón 500 mil seguidores y armó la estructura para que el Movimiento Regeneración Nacional (Morena) sea partido político.
El izquierdazo que López Obrador dio al PRD los dejó viendo estrellitas y mientras analizan cómo responder, el tiempo se les ha ido y aún no saben qué ni cómo lo harán.
El líder nacional del partido y cerebro de Nueva Izquierda o Los Chuchos, Jesús Zambrano, parco y cortante, desestimó el movimiento de López y descartó una desbandada hacia Morena, pero ésta ya comenzó y continuará hasta dejarle más débil que un beneficiario de Oportunidades por la jugosa cantidad que recibe.
Martí Batres fue el primero en renunciar al PRD para irse a Morena como presidente y tuvo que dejar la bancada en San Lázaro, donde era pastoreado por Silvano Aureoles -de la tribu de Amalia García- quien también lo ha desestimado.
Alejandro Encinas y otros no lo han hecho porque quieren mantener la beca en el PRD, pero loharán tarde o temprano.
El PRD debe ponerse las pilas con miras a su Congreso Nacional los próximos 14 y 16 de diciembre en la Ciudad de México, porque el tiempo se agota.
¿Y qué tal Graco Ramírez, gobernador de Morelos?
El jueves en el foro ¿Hacia dónde va la izquierda?, en Cuernavaca. llamó a los perredistas a exorcizar al fantasma de López Obrador y a asumir un compromiso “con el proyecto más importante de la izquierda en México”.
Después de que gracias al efecto AMLO, Ramírez en Morelos y Arturo Núñez en Tabasco, así como muchos otros tienen hoy un cargo, le da una puñalada.
Como dijo ayer Ricardo Monreal –igualmente saltimbanqui ¡eh!, aunque leal al tabasqueño-: “Tanto Graco como muchos otros gobernadores de la oposición le deben su triunfo a la fuerza electoral que significó la candidatura a la Presidencia de López Obrador. Sin él, muchos no seríamos diputados y muchos no serían gobernadores”.
Y razón no le falta. López Obrador, aunque lo nieguen, es el valor más grande con el que cuenta la izquierda actualmente y su salida desarma al sol azteca.
Otro que no podía quedarse atrás es Guadalupe Acosta Naranjo. Lupe, pa’los cuates, está a favor del gobierno, del color que sea, y en contra de AMLO.
Y el remate lo dio Cuauhtémoc Cárdenas. “Yo no veo una desbandada. Se han ido algunas personas, que puedo contar con los dedos de una mano” dijo el fundador del PRD, lo que le da autoridad para hablar.
Elección de líder en el DF
Y en ese contexto, el PRD en el Distrito Federal llevará a cabo hoy en el World Trade Center su séptimo consejo estatal para elegir dirigente, en lugar de Manuel Oropeza.
Los Bejaranos o Izquierda Democrática Nacional (IDN) –matrimonio René Bejarano y Dolores Padierna- envían al ruedo a Enrique Vargas, ex delegado en Azcapotzalco, mientras con la bandera de Nueva Izquierda (NI) o Los Chuchos y anexas llega Vidal Llerenas, actualmente asambleísta.
Los Bejaranos ya dominan la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) y la mayoría de las delegaciones políticas y ahora quieren hacerse del partido capitalino. La clave será la secretaría general, donde se negocia meter un comodín.
La chamba de Beltrones
La negociación para la toma de protesta de Enrique Peña Nieto en la Cámara de Diputados parece planchada. La sesión comenzará a las nueve de la mañana del sábado 1, los siete partidos fijarán su posición y luego, con Felipe Calderón ya en el salón, el mexiquense llegará para asumir como presidente de México y jurar respetar y hacer respetar la Constitución y las leyes que de ella emanen… e irse a Palacio Nacional a dirigir su primer mensaje.
¿Por qué no hablar en la tribuna? Los operadores y el equipo de transición priísta creyeron conveniente evitar en lo posible otro espectáculo de la izquierda, radical y no, con la toma de la tribuna, el despliegue de pancartas de protesta, el grito de consignas y los jaloneos y empujones, comunes en los doce largos años de foxismo-calderonismo.
Si el PRI, el nuevo PRI, pretende reinstaurar las formas republicanas, debió enviar una señal de contundencia y mando al organizar el discurso ahí, en San Lázaro, ante los representantes de los tres poderes de la Unión, y no evitar a toda costa a los llamados rijosos.
El equipo de transición buscó librar esas escenas y dependerá de Manlio Fabio Beltrones, Don Beltrone, y de Jesús Murillo Karam, líder del grupo Hidalgo y próximo procurador general de la República, la operación para tratar de que las protestas dentro de la Cámara no se desborden. En el Partido de la Revolución Democrática (PRD), la división por el nacimiento de Morena provocará que sólo los lopezobradoristas se manifiesten y que el resto, entreguista como siempre, se registre en el aplausómetro. Del PAN, ni preocuparse, porque es comparsa.
En la calle, donde sí estará la mayoría radical, no hay problema porque San Lázaro será un búnker desde el miércoles próximo para evitar que se aproximen, siquiera. La protesta será, según AMLO, en el Angel de la Independencia el sábado a las 11 de la mañana.
Por lo pronto, Peña Nieto viajará el lunes a Estados Unidos para reunirse en Washington con el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, el martes 27, y, de ahí, a Ottawa para entrevistarse con el premier Stephen Harper al otro día.
A las 12 de la noche
Tal como sucedió con Ernesto Zedillo y Vicente Fox, la entrega de estafeta entre Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto se llevará a cabo el próximo viernes 30 a las doce de la noche –primer minuto del 1 de diciembre-, sólo que, a diferencia de 2000, cuando fue en Los Pinos, ahora será en Palacio Nacional.
El gabinete de Peña Nieto será anunciado el viernes 30 a las 17:00 horas y protestará en el primer minuto del sábado, para esperar las ceremonias protocolarias.
Cuchara pozolera de Azucena
La que se sirvió con la cuchara pozolera fue Azucena Olivares, presidenta municipal de Naucalpan, esposa de Guillermo González, quien endeudó al ayuntamiento al estilo Moreira en Coahuila.
De alrededor de 800 millones de pesos que tenía al asumir hace tres años llegó a mil 560 millones.
Lo grave es que ha dejado de pagar salarios hasta a los policías, quienes protestaron el jueves y exigieron su cheque, porque ya viene diciembre y con el fin de año concluirá la administración. Las deudas son con proveedores y empleados.
Barredora de 4 mil directores
Todavía no asumen y ya metieron tijera.
En el Senado, la Comisión de Gobernación aprobó reformas a la Ley del Servicio Profesional de Carrera y, ¡lotería!, cuatro mil funcionarios federales de director general, director general adjunto y subdirector se irán de vacaciones permanentes.
Y es que el PAN creó miles de plazas pero, en lugar de suprimirlas, las vaciarán para que las ocupe el personal de confianza del nuevo gobierno.
Según Cristina Díaz, presidenta de esa comisión, se respetarán los derechos de quienes hayan concursado su plaza de Dirección General y fueron certificados
Gabinetazo
Miguel Angel Mancera dará a conocer su gabinete en breve y el jueves en el 30 aniversario de la Central de Abasto, reconoció que algunos podrían repetir. Por lo pronto, los hermanos Julio César y Luis Ernesto Serna, fieles escuderos del ex procurador, aparecen en la lista, así como José Ramón Amieva. El que se tambalea es el procurador Jesús Rodríguez Almeida por el caso Cinépolis, mientras al que le han echado montaña por su presunto salto al gabinete presidencial es a Manuel Mondragón y Kalb, secretario de Seguridad Pública capitalino.
La neta si alguno merece la repetición es precisamente el área de seguridad, donde Mondragón, cinta negra de tae kwon do, ha metido orden.
Canta Calderón
“Soy un perro negro y callejero, sin hogar sin hembra y sin dinero”, dice la canción de Alex Lora y su famoso Tri.
Pues esa no es la que cantó –destrozó-, Felipe Calderón en su visita a La Piedad, Michoacán.
No, el panista se aventó acompañado por banda el corrido El Perro Negro, de José Alfredo Jiménez. Don Felipe de Jesús Calderón Hinojosa, dicharachero como es, se puso a cantar con banda en la inauguración de un libramiento.
Y ya en la broma, aunque él dice que fue en serio, revivió un viejo proyecto -suyo en 2003- para cambiar el nombre el país, borrarle Estados Unidos Mexicanos y dejarlo simplemente en México “porque suena más bonito”.
Y los priístas se le fueron encima. Razón no les falta, pero no deben olvidar que en 1993, Florencio Salazar presentó una iniciativa similar que no prosperó por el surgimiento del EZLN el 1 de enero de 1994.
Estrellita a la Marina
Y así como en el DF la labor de Mondragón merece estrellita, la de la Secretaría de Marina (Semar) tendría que ser reconocida por sus constantes golpes al crimen en la guerra de Calderón.
Y en esa guerra, la guapa ex alcaldesa de Tiquicheo, Michoacán, María Santos Gorrostieta, fue ejecutada al tercer intento. ¿La respuesta? Que le retiraron la escolta pese a haber sufrido dos atentados, donde perdió a su esposo en uno de ellos. No tienen madre.
Los marinos, como dijo el ex embajador de Estados Unidos, Carlos Pascual, demostraron ser los más entrones y los mejor preparados. Independientemente de lo estúpido de esta guerra y sus funestas consecuencias –cien mil muertos, 40 mil desaparecidos y miles de desplazados-, merecen algo más que un aplauso. Faltan sólo siete días.
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