TLALNEPANTLA, Méx. La guerra electoral inició en el estado de México. Los partidos políticos disputan desde ahora los cargos de elección popular que estarán en juego el próximo 1 de julio: 125 ayuntamientos, 45 diputaciones locales, 40 diputaciones federales y dos senadurías de mayoría.
Varios ejércitos se alistan para entrar de lleno al campo de batalla. El del Instituto Electoral del Estado de México (IEEM), árbitro de la contienda local; del Instituto Federal Electoral (IFE), que está a cargo de la elección federal, y de los partidos políticos que participarán en los comicios, solos o aliados.
La batalla final será el 1 de julio en las urnas. Los contendientes saben que lo que avancen ahora será fundamental para concretar su triunfo. Por eso cada partido diseña estrategias y amaga golpes –sobre todo mediáticos- para debilitar al otro. Los ciudadanos, en su mayoría, observan solamente.
En este momento los partidos políticos están enfrascados en batallas internas para definir las candidaturas. A pesar de que aseguran que sus procesos son democráticos, las tres principales fuerzas políticas, PRI, PAN y PRD, son cuestionadas por sus propios militantes de imponer candidatos y de utilizar la añeja práctica del “dedazo”, pero disfrazada.
ALTERNANCIA REAL
Antes de 1996 la gran mayoría de municipios del estado de México eran gobernados por el PRI. En la actualidad la alternancia es una realidad y 117 de los 125 municipios mexiquenses han sido gobernados por más de una opción política. Algo similar ocurre con el Congreso local. Por ello los partidos políticos saben que las posibilidades de ganar están ahí, en los hechos.
“Entre 2006 y 2009 hubo alternancia en 117 de los 125 municipios del estado de México, es decir más de 90% de la población optó por cambiar una o más veces el partido gobernante”, asegura Luis Videgaray Caso, coordinador de la campaña de Enrique Peña Nieto rumbo a la elección presidencial del 2002.
En un artículo publicado en un diario capitalino el 13 de julio del 2011, luego del triunfo casi absoluto del PRI en la entidad, Videgaray Caso muestra el ejemplo de Ecatepec, el municipio más poblado del estado de México y del país, donde en 2000 ganó el PAN, en 2003 el PRI, en 2006 el PRD y en 2009 volvió a ganar el PRI.
El priísta afirma que a partir del 2006 la composición política del Congreso del estado de México también se diversificó. Antes el PRI ganaba casi la totalidad de diputados de mayoría y los partidos de oposición se quedaban con los legisladores de representación proporcional. Pero las cosas cambiaron.
“En el periodo 1996-2000 el PRI tuvo el mayor número de diputados, sin obtener por sí mismo la mayoría. En 2000-2003 se repitió ese escenario, pero a favor del PAN. Entre 2003 y 2006 PAN y PRI tuvieron casi el mismo número de diputados. Entre 2006 y 2009 el Congreso local se dividió en tercios prácticamente exactos entre PAN, PRI y PRD. Finalmente, en 2009 el PRI ganó la mayoría”, precisa.
Videgaray Caso afirma que el comportamiento exigente del electorado se reproduce, con matices, a nivel nacional y regional. “En la democracia no hay triunfos ni derrotas absolutas. Quien pierde una elección no es marginado de la política. De hecho, un partido desde la oposición puede ser opción viable de gobierno en la siguiente”, reflexiona.
Raúl Río Valle Uribe, ex perredista y actual militante del Movimiento Ciudadano (antes Convergencia), considera que la elección federal del 2012 se definirá en tercios, es decir casi en partes iguales entre PRI, PAN y PRD, situación que será similar en el estado de México.
El político afirma, en el artículo “El 2012 se disputa a tercios”, que varios indicios confirman que habrá escenario de tercios, “a pesar de lo que digan mañosamente los que hacen las encuestas y los medios que los patrocinan”.
Explica:” El PRI, el PAN y el PANAL buscan sus votos en el mismo nicho electoral de la derecha. Este es un hecho relevante, se van a restar votos entre ellos. Vamos a tercios”.
CARGOS DE ELECCIÓN, BOTÍN POLÍTICO
Mauricio Valdés Rodríguez, director del Instituto de Administración Pública del Estado de México (IAPEM), lamentó que exista una subcultura en los partidos políticos, que ven los cargos de elección popular como botín, más que como una responsabilidad.
“Lamentablemente sí es este el propósito y no es distinguido de un partido o de otro, lamentablemente una práctica de la subcultura de los cargos públicos, verlo como un botín”, comenta.
Añade: “Lo que tenemos que superar es un sistema que parece de botín, como si fueran corsarios que ganan una elección y al ganar una elección no buscan al más capaz, sino al amigo o al que le tienen que pagar una factura por sus trabajos en campaña. Eso tenemos que superarlo, de otra manera no vamos a mejorar la capacidad de respuesta del gobierno”.
Valdés Rodríguez relata que los partidos políticos tienen plataformas electorales que deben implementar en caso de que obtengan el triunfo electoral, aunque con frecuencia no ocurre así.
“En la realidad pasa que luego se les olvida qué fue lo que postularon en sus plataformas electorales, pero para eso estamos los ciudadanos y tenemos que organizarnos para exigir más, que cumplan con las plataformas electorales de los que ganan”, precisa.
OPTIMISTAS
Dirigentes en el estado de México del PRI, PAN y PRD se muestran optimistas con los comicios del 2012, amparados cada uno en sus respectivos precandidatos presidenciales que, aseguran, les traerán votos en el ámbito local.
El diputado federal Carlos Pérez Cuevas, del PAN, coordinador en el estado de México de la campaña de Josefina Vázquez Mota como precandidata a la Presidencia de la República, confía que su partido recuperará posiciones en el 2012, como el antes llamado “corredor azul”, que tuvo Acción Nacional durante 12 años.
“Los panistas del estado de México estamos en pie de lucha”, destaca, a pesar de que ahora el “corredor azul” es totalmente tricolor.
El priísta Videgaray Caso considera que el papel de Peña Nieto como gobernador mexiquense es fundamental para que la ciudadanía ratifique en los comicios del próximo 1 de julio el triunfo del PRI en muchos ayuntamientos de la entidad.
La dirigencia del tricolor espera prácticamente “carro completo”, por lo menos en los municipios considerados de mayor importancia política, como los de los valles de México y Toluca.
Juan Hugo de la Rosa, dirigente del PRD en la entidad, destaca que su partido se consolidará en los municipios que gobierna y recuperará parte del bastión que tuvo en la zona oriente de la entidad, donde gobernó municipios tan importantes como Nezahualcóyotl, Ecatepec y Texcoco.
LOS NÚMEROS
La participación ciudadana en comicios del estado de México no rebasa el 65.8% obtenido el 2 de julio del 2000 en la elección para diputados locales y ayuntamientos, en parte atribuido al llamado “efecto Fox” de ese año.
En comicios para elegir ayuntamientos y diputados locales en 1996 la participación fue de 46.5%, en el 2000 de 65.8%, en el 2003 de 42.8%, en 2006 de 43.6% y en 2009 de 52.2%.
Solamente en comicios extraordinarios efectuados en 1997 en el municipio de Ayapango se rebasaron las expectativas de participación, con 82%.
El próximo 1 de julio serán instaladas en la entidad 17 mil 709 casillas, atendidas por 123 mil 963 funcionarios. De una población total de 15 millones 175 mil 865 habitantes, según el censo del 2010, podrán votar 10 millones 498 mil personas inscritas en la lista nominal, con datos del 31 de diciembre del 2011.
El IEEM destinó 750 millones 895 mil 373 pesos como financiamiento público a los siete partidos políticos que participarán en los comicios locales de este año, de los cuales 168 millones fueron para el PAN, 200 millones para el PRI y 124 millones para el PRD, mientras que el resto fue repartido entre PT, PVEM, Movimiento Ciudadano y Nueva Alianza.
La guerra electoral empezó, pues. Y en la batalla queda en medio la ciudadanía, cuyo voto definirá a vencedores y vencidos