En política no hay casualidades, sino todo lo contrario.
Tras la instalación del nuevo régimen de 4ta., ha sido evidente como diversos medios de comunicación han cedido a las presiones de carácter político, del actual gobierno y su visión sobre lo que deben transmitir los medios de comunicación, a su favor y conveniencia.
Es así, como hemos constatado la cancelación y extinción gradual de programas noticiosos incómodos para el gobierno actual, debido a su línea editorial crítica y escrupulosa, hacia la información generada por la clase política y los distintos niveles de gobierno, en el actuar del nuevo régimen.
En contra sentido, se ha motivado el enquistamiento de nuevos espacios noticiosos con tendencia informativa y de análisis en favor del gobierno. No es casual, que los primeros meses de la 4ta., surgieran nuevas programaciones pro-gobierno, tanto en radio como televisión, y tendenciosos de manera pública y sin reservas, para presentarse como aplaudidores propagandísticos del nuevo régimen y promotores del culto a la personalidad de López Obrador.
Programas como el de “Aristegui Noticias”, que reapareció en la frecuencia de Radio Red, de Grupo Radio Centro; “La Maroma Cósmica” y “John y Sabina”, en canal once; “Me canso ganso” y “El Chamuco TV”, en canal 22. Programas surgidos a la par de la 4ta. cuyo contenido no es otra cosa sino mera y vulgar propaganda en pro del Gobierno federal y de Morena.
En tanto, programas y conductores de radio o televisión han ido acotándose y relegándose de los espacios noticiosos, por ser críticos y generadores de opinión incómodos al nuevo régimen. Tal es el caso de los conductores Sergio Sarmiento y Lupita Juárez, del programa extinto de “Sergio y Lupita” y de Jesús Martín Mendoza, del programa de la tarde, en la Red de Radio Red, de Grupo Radio Centro; o, el caso más reciente, de Carlos Loret de Mola, en el programa “Despierta”, de Televisa.
A lo anterior, es de entender la explicación del escritor y periodista Rafael Loret de Mola, quien expresó su preocupación por lo que llamó una “cacería de periodistas” en la administración de López Obrador. El escritor aseguró que, en el caso de Televisa, el presidente firmó un convenio de mil millones de pesos a cambio de pedir cualquier cosa, hasta que “guillotine a un periodista”.
Por ello, no es casual que la bancada del PT, proponga una Ley Mordaza para los medios de comunicación, a través de su diputado federal Óscar González Yáñez, quien asegura que, si no se regula a los medios de comunicación, se convertirán en un instrumento de la derecha en las elecciones federales del 2021 y del 2024.
Es así, como en la era de la 4ta. se busca echar reversa en la libre expresión y la libertad de contenidos editoriales, en los espacios noticiosos, bajo la premisa de que el movimiento de la cuarta transformación solamente ha ganado las elecciones, pero no ha desmantelado los “poderes fácticos”. Es decir, no han logrado acallar el pensamiento crítico, divergente y de contraste, que evidencia y amenaza con exponer los errores y tropiezos que frecuentemente tiene el gobierno de López Obrador.