TOLUCA, Méx.- La Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM) informa la localización de Liliana Hernández Sánchez, de 16 años de edad; María Fernanda López Muciño, de 14 años; Dulce Guadalupe Gutiérrez Rivera, de 15 años, y Berenice Bartolo Vera, de 14 años, quienes fueron reportadas como desaparecidas en el Estado de México e incluidas en el programa Alerta Amber.
Por lo que respecta a Liliana, quien decidió alejarse de su entorno familiar por voluntad propia, las diligencias efectuadas para su localización permitieron ubicar a la joven, cuando viajaba en un autobús con destino a la ciudad de Cancún, del estado de Quintana Roo, el cual fue interceptado en un retén de la Policía Federal.
Elementos de la Fiscalía Especializada para la Investigación de Personas Desaparecidas, No Localizadas, Ausentes y Extraviadas se trasladaron por la joven para traerla consigo a la entidad mexiquense, para llevar a cabo las diligencias correspondientes y poder reintegrarla a su núcleo familiar.
En el caso de María Fernanda, la adolescente igualmente decidió abandonar el núcleo familiar por voluntad propia debido a presuntos problemas familiares. Cabe señalar que esta es la segunda ocasión que ella sale de su hogar.
Asimismo, Dulce Guadalupe argumentó que huyó de su casa porque no le permitían salir y el tiempo que pasó fuera, estuvo con unos familiares en el municipio de Chimalhuacán.
Finalmente, Berenice Bartolo Vera en entrevista ante el Representante Social narró que salió por voluntad propia de su hogar por una mala relación con su familia, la primera noche que pasó fuera de su casa se quedó en unas cabañas con su novio, de las cuales aseguró no recordar la ubicación; posteriormente tomó un taxi al centro de la ciudad de Toluca, donde una familia le brindó apoyo llevándosela a su casa y después le dieron dinero para que regresara con su familia.
La Procuraduría mexiquense agradece a los medios de comunicación la difusión de las Alerta Amber emitidas para la desaparición de estas cuatro menores, e informa que debido a su localización, quedan oficialmente canceladas. Al mismo tiempo, hace un llamado a los padres de familia para fortalecer los vínculos de comunicación con sus hijos e hijas, y evitar así que los jóvenes se expongan a situaciones de vulnerabilidad cuando, por su propia voluntad, deciden abandonar el núcleo familiar.