TOLUCA, Méx.- Para contribuir con el tratamiento o confinamiento de los residuos peligrosos provenientes de la industria local, académicos de la Universidad Autónoma del Estado de México desarrollaron un procedimiento mediante el que se elimina por completo la toxicidad del cromo VI, metal tóxico ocupado por la industria de galvanoplastia -proceso electroquímico con el cual se cubre un metal con otro, por ejemplo, el cromado.
Al respecto, el especialista de la Facultad de Química de la UAEM, Jorge Javier Ramírez García advirtió que con la reducción del estado de oxidación del cromo VI y convirtiéndolo a cromo III es posible eliminar en un 100 por ciento su toxicidad; agregó que incluso, la utilización del cromo III significa beneficios para la salud y posibilidades de regeneración del metal para su posterior reutilización.
“Dicho procedimiento es posible gracias a la aplicación de un ácido ascórbico, bajo condiciones de ph óptimas y buscando la neutralidad para no generar otro componente contaminante como lo es el agua ácida, pues se perderían los beneficios, cambiando de una sustancia dañina a otra”.
Ramírez García puntualizó que con este tipo de soluciones se contribuye a aminorar el cambio climático, al tiempo que son protegidos los trabajadores de la industria que manipulan ese metal, que junto con el plomo, representa poco más de 30 por ciento de la contaminación total aportada por la industria de galvanoplastia.
Mediante estos avances desarrollados por la UAEM, donde la conversión del cromo VI al III está concluida y significa menos contaminación una vez que pueda ser aplicada en los procesos de la industria, consideró, sólo queda determinar la forma en que el cromo III será regenerado, proceso en el que ya se está trabajando.
Afirmó que otro factor importante que modifica y agrede la ecología es el desecho de fármacos, pues del total adquirido por la población y hospitales, sólo se utiliza aproximadamente 30 por ciento, mientras que el resto es desechado.
Sobre lo anterior, detalló, la Facultad de Química de la UAEM emprendió un proyecto de investigación para identificar los metabolitos tóxicos creados por el proceso de degradación de los fármacos, con el objetivo de erradicarlos.
Por último, Jorge Ramírez indicó que en el trabajo de investigación para eliminar la toxicidad del cromo VI se contó con la colaboración de la especialista del Instituto Nacional de Investigaciones Nucleares (ININ), Elizabeth Teresita Romero Guzmán, el investigador de la UAEM, Arturo Colín Cruz, y la alumna universitaria Luz Alicia Galeana.