RIO DE JANEIRO, Brasil.- Juma, una jaguar de casi nueve años que participó en la ceremonia del paso de la antorcha olímpica en la ciudad de Manaos, capital del estado brasileño de Amazonas, fue abatida a tiros epara evitar que saliera de una zona de control.
El jaguar supuestamente intentó atacar a su cuidador, al escapar durante su traslado. Los militares intentaron controlar los movimientos del animal con dardos tranquilizadores, pero al no obtener ningún éxito tuvieron que matarlo a disparos.
El suceso ha abierto una nueva polémica que salpica a los Juegos de Río 2016 y ha puesto sobre la mesa el absurdo de una tradición permitida por la ley: el desfile de animales salvajes en los acontecimientos militares en esta región.