TOLUCA, Mëx.-Para absorber a los nuevos demandantes de empleo, la actividad económica en México debe crecer en casi cinco por ciento al año, aseguraron los académicos Alma Yeni y Oscar Alfredo Barrios Márquez, quienes refirieron que de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el crecimiento económico del país el cuarto trimestre de 2012 fue de 3.2 por ciento, insuficiente para lograr que el aparato productivo genere nuevas oportunidades de empleo.
Los docentes de la Facultad de Economía de la Universidad Autónoma del Estado de México señalaron que durante el cuarto trimestre de 2012, el total de la Población Económicamente Activa (PEA) se ubicó en 50.7 millones de personas, lo que representa 58.9 por ciento de la población en edad de trabajar, cuando un año antes había sido 50.3 millones (59.5%), creando con ello, una necesidad de empleos de casi 3.0 millones de personas en lo que va de 2010 a 2012 (cuarto trimestre).
Ante esta situación, refirieron los especialistas en Economía, alcanzar un crecimiento económico dinámico y sostenido proviene de la necesidad de generar los empleos que demanda el incremento de la PEA, entendida como la población de 14 años y más de edad (población en edad de trabajar), que durante el periodo de referencia realizó una actividad económica (población ocupada) o buscó activamente hacerlo en las últimas cuatro semanas (población desocupada).
Al realizar un análisis del mercado laboral en México durante el cuarto trimestre de 2012, los académicos puntualizaron que su investigación se fundamentó en las cifras disponibles en la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), publicada por el INEGI, y de organismos como el International Monetary Fund (IMF) y el Banco de México (BANXICO).
Los expertos destacaron que desde las últimas décadas del siglo XX se ha observado en México un rápido aumento de las personas en edad de trabajar y en especial de la PEA; muchas de ellas, pertenecientes a generaciones nacidas durante el periodo de acelerado crecimiento demográfico del pasado (1950-1970), lo que ha mantenido una presión continua sobre el mercado laboral nacional.
En este sentido, consideraron, el mercado laboral del país registra una dinámica insuficiente para absorber el aumento de la PEA, debido a las menores expectativas que tiene la población de participar o no en la actividad económica, así como la incorporación creciente de la mujer al mercado de trabajo.