En las elecciones presidenciales de julio de 2000, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) perdió la contienda ante el candidato del Partido Acción Nacional (PAN). Luego de 71 años en el poder, un candidato de oposición llegó a la presidencia de la República: Vicente Fox Quezada. Sin embargo, el PRI, partido pilar del sistema autoritario mexicano, no se vio afectado en sus estructuras internas. El poder que ejercía el presidente priista en turno pasó a los gobernadores en los mismos términos y prácticas aprendidas y heredadas durante más de siete décadas de control político. Precisamente, luego de doce años de estar en la oposición del poder presidencial, el PRI saldría renovado y fortalecido para llevar a un gobernador de sus filas a la cima del Poder Ejecutivo del país. Los gobiernos panistas no quisieron o no supieron cómo restar influencia y representatividad al PRI; al grado que este partido, desde la oposición, siguió controlando los tiempos y movimientos de la política nacional. Los dos presidentes panistas lo vieron como aliado, cuando en realidad era un adversario al acecho.
Neutralizado el presidente Fox y luego el presidente Felipe Calderón Hinojosa, el PRI se refugió en la poderosa, sólida y experta clase política del estado de México, más conocida y reconocida como “Grupo Atlacomulco”, fundado por Isidro Fabela en 1942. Desde ahí prepararon el terreno del resurgimiento del PRI en uno de los suyos. El gobernador Arturo Montiel Rojas (1999-2005) quiso ser candidato, lo intentó, pero el 20 de octubre de 2005 renunció a sus aspiraciones de abanderar al PRI, dejando el camino a su adversario interno, Roberto Madrazo Pintado. Con su renuncia prácticamente estaba garantizando el triunfo al candidato del PAN que en ese entonces era Felipe Calderón Hinojosa. El PRI mexiquense no compitió en aquella elección, por lo tanto, su inactividad favoreció al PAN con quien tuvo acercamientos de apoyo para vencer al candidato de izquierda, Andrés Manuel López Obrador.
En su intento por lograr la candidatura, Montiel formó parte activa del grupo denominado Unidad Democrática, mejor conocido como Tucom, “Todos Unidos Contra Madrazo”. Según Arturo Montiel está organización fue impulsada por “Ernesto Zedillo con gobernadores afines a él, para combatir al interior del PRI a Roberto Madrazo”[1]. De hecho, Montiel ganó una encuesta realizada por este grupo para elegir al mejor posesionado de entre sus integrantes: Eduardo Bours, Tomás Yarrintong, Natividad González Parás, Enrique Martínez y Martínez, Manuel Ángel Núñez Soto, Enrique Jackson y Miguel Alemán Velasco. El resultado fue presentado por Transparencia Mexicana… “tras un proceso realizado a través de tres casas encuestadoras contratadas para tal fin: Mitofsky, Parametría, Ipsos-Bimsa”[2]. Este resultado lo colocó con fuertes posibilidades de competir y ganar la nominación al interior del PRI a Roberto Madrazo Pintado, quien había sido presidente del partido, posición que aprovechó para fortalecer sus aspiraciones políticas. Hecho que Montiel no dejo de denunciar por ser juez y parte del proceso interno.
Dadas las circunstancias de aquella ríspida elección interna entre Montiel y Madrazo firmaron un pacto de civilidad ante el presidente del partido, Mariano Palacios Alcocer. También lo firmó el otro aspirante en competencia Everardo Moreno, personaje sin ninguna posibilidad de ganar, que al competir lo hacía en su calidad meramente de militante del PRI. Al final, acusado de enriquecimiento inexplicable Montiel Rojas presentó su renuncia. Las reacciones fueron diversas entre la clase política del PRI. Para el senador Manuel Bartlett Díaz fue desastroso lo que pasó en su partido durante la contienda por ganar la candidatura presidencial de 2006. “Y aseguró que la decisión de Arturo Montiel fue provocada por la ambición de Roberto Madrazo, quien con ello… originó una crisis en ese instituto político”[3].
Con el poder económico del estado de México, el gobernador Montiel aglutinó a gobernadores y figuras políticas con influencia al interior del partido. Su enfrentamiento con Madrazo fue más por el control de PRI nacional; si Montiel hubiera logrado tener un presidente nacional del partido a modo, sin ninguna duda habría logrado la candidatura. Cosa que lograrían lo mexiquenses seis años después con la candidatura de Enrique Peña Nieto. La estrategia del ex gobernador Montiel Rojas estuvo bien orientada, pero no pudo contrarrestar las acusaciones de enriquecimiento de él y miembros de su familia. De hecho, fue su contrincante Madrazo Pintado quien dijo tener pruebas de que “Montiel poseía propiedades millonarias en México, Francia y España”[4].
El ex gobernador trató de desmentir lo expresado por su adversario en el mismo programa televisivo de Joaquín López Dóriga; sin embargo, el escándalo lo rebasó. Adicionalmente a las acusaciones hechas por Madrazo, también se hicieron públicas diversas cuentas bancarias con manejo de fuertes cantidades de dinero, de manera contundente “a Montiel y a su familia se atribuyeron bienes en Acapulco, Toluca, Valle de Bravo, Ixtapan de la Sal y Houston, y hasta un “castillo” en Francia, de donde es nativa su segunda esposa, Maude Versini”[5]. También fue señalado de dejar endeudadas las finanzas estatales al pasar de 21 mil millones de pesos en 1999 a más de 31 mil millones en 2005. En general, este fue el escenario que Montiel no pudo revertir.
Su renuncia fue inevitable, pero no sentenciaba a la clase política mexiquense al fracaso. Desde 1942 habían buscado llegar a la presidencia de la República y el enfrentamiento con Madrazo era solo un obstáculo más. Ya lo habían intentado Alfredo del Mazo González y el Profesor Carlos Hank González sin éxito. Cierto que en el estado de México se registra un presidente de la República en la figura de Adolfo López Mateos, pero nunca ha sido considerado de la clase del política de aquella región al ser oriundo del municipio de Atizapán de Zaragoza. En sentido estricto, Roberto Madrazo formó parte indirectamente del llamado “Grupo Atlacomulco” al ser protegido del Profesor Carlos Hank González, que a la muerte trágica de su padre Carlos Madrazo, asumió su protección y parte de su educación. Siendo regente de la Ciudad de México, Carlos Hank lo hizo delegado. En las elecciones federales de 2006, el PRI quedó en tercer lugar, a más de cuatro millones de votos de Acción Nacional. La competencia real fue con López Obrador que perdió por 233,821 votos. La elección más cerrada de la historia nacional.
Tras la desastrosa campaña de Roberto Madrazo, la clase política mexiquense se fortaleció hacia el interior del estado y empezaron a operar para asumir el control el priismo nacional, dando forma y orientación a su lucha por la presidencia del país. Previo a este propósito y bajo el liderazgo de Arturo Montiel se puso en marcha el proceso de selección del candidato a gobernador del PRI con la participación de nueve aspirantes: “Guillermo González Martínez, Oscar Gustavo Cárdenas Monroy, Jaime Vázquez Castillo, Eduardo Bernal Martínez, Fernando Alberto García Cuevas, Cuauhtémoc García Ortega, Isidro Pastor Medrano, Enrique Jacob Rocha, Héctor Luna de la Vega y Carlos Hank Rhon”[6]. Al final el delfín de Montiel Rojas fue Enrique Peña Nieto. Un hecho a destacar es que mientras Peña hacia campaña para ganar la candidatura y luego la campaña de gobernador, Montiel hacia campaña para hacerse de la candidatura a la presidencia de la República. El primero ganó contundentemente la elección a gobernador y el segundo tuvo que renunciar a sus aspiraciones por fuertes acusaciones de corrupción y desvío de recursos públicos.
En las elecciones para gobernador del 3 de julio de 2005, el candidato de la Alianza PRI-PVEM, Enrique Peña Nieto obtuvo 1, 801,530 votos, es decir el 47.57 por ciento; el candidato de la alianza del PAN-Convergencia, Rubén Mendoza Ayala alcanzó 936,615 votos, es decir el 24.73 por ciento; por su parte, la candidata de la alianza PRD-PT, Yeidckol Polevnsky, logró 918, 347 votos, lo que representó el 24.25 por ciento de los sufragios. La lista nominal de electores fue de 8, 869, 630, con una votación total de 3, 786,929 votos[7].
Ni a melón supieron los adversarios a la desbordante campaña del candidato del PRI, Enrique Peña Nieto. El joven político, miembro destacado del grupo creado por el gobernador Arturo Montiel, conocido como los “Golden Boys” resultó un extraordinario producto para la mercadotecnia política manejada magistralmente por los medios de comunicación, principalmente las televisoras.
[1] Navarro, José Luis, Reseña de “Arturo Montiel desde Atlacomulco: Testimonio del ex gobernador del Estado de México” de Meraz, N.El Cotidiano [en linea] 2012, (Marzo-Abril) : [Fecha de consulta: 7 de julio de 2016] Disponible en http://www.redalyc.org/comocitar.oa?id=32523118018 ISSN 0186-1840.
[2] Será Montiel candidato del Tucom. Tomado de: https://www.elsiglodetorreon.com.mx/noticia/162916.sera-montiel-candidato-del-tucom.html 4 de agosto de 2005.
[3] Renuncia Montiel a la candidatura del PRI. Tomado de: http://laopinionderaydigon.blogspot.mx/2005/10/renuncia-montiel-la-candidatura-del.html jueves 20 de octubre de 2005.
[4] Exgobernadores envueltos en polémica por acusaciones. Tomado de: http://mexico.cnn.com/nacional/2012/05/27/arturo-montiel-del-estado-de-mexico Sábado 3 de marzo de 2014.
[5] Gloria Leticia Díaz. Montiel, bajo investigación de Hacienda. Tomado de: http://www.proceso.com.mx/294807/montiel-bajo-investigacion-de-hacienda 13 de enero de 2012.
[6] Luis Aldana. La herencia Peña Nieto. PDF. Tomado de: http://es.slideshare.net/tercote/la-herenciadepenanietopdf 10 de marzo de 2012.
[7] Instituto Electoral del Estado de México. IEEM. Resultados del cómputo distrital de la elección de gobernador 2005. Tomado de: http://www.ieem.org.mx/numeralia/result_elect.html