¡Que no panda el cúnico! No se angustien, no se alarmen, somos más y vamos a triunfar, dijo el presidente Felipe Calderón el martes pasado… ¡a los niños!
La obsesión por una guerra que se mantendrá hasta el último día de su mandato, según anunció ayer, ha llegado a tal grado que ya no mide consecuencias y el mismo discurso lo pronuncia igual ante adultos mayores que ante niños becarios, quienes si no estaban preocupados, lo cual es difícil porque son muy inteligentes y se mantienen alertas a todo, ahora lo están, gracias a que el presidente les ofreció luchar por la libertad y su futuro.
“Como papá a veces quisiera que mis hijos no vieran algunas noticias, algunas escenas, los periódicos. Sin embargo, sé también, me imagino que es el caso de ustedes, que de repente ya están programándose, si no ven el noticiero conmigo, lo programan para verlo y van y revisan los periódicos”, dijo en el patio del Museo de Antropología, como adelanto de lo que sería ayer el mensaje por su quinto informe de Gobierno, luego de que lo mudara desde el Auditorio Nacional “por respeto a las 52-53 víctimas del Casino Royale” de Monterrey, Nuevo León.
“Ustedes no se angustien, no se alarmen, porque nosotros y sus papás estamos haciendo nuestra parte y vamos a remediar esto”, dijo al asegurar que niños y niñas del país merecen una explicación “y se las voy a dar”.
Y el pedagógico discurso se dio justo un día después de que un loco baleara un autobús escolar en La Herradura, Huixquilucan, con seis pequeños a bordo y en el que, por instrucción de la asistente del chofer, los pequeños se tiraron al piso, como sucede en las escuelas de Monterrey, Acapulco, Morelia, Nuevo Laredo, Reynosa y Juárez.
O como en Amatepec, Tlatlaya, Zumpahuacán, Valle de Bravo, Tejupilco y Luvianos, Estado de México, donde se suspendieran las clases en planteles de nivel básico hasta el próximo lunes, debido a las balaceras entre La Familia y federales.
Y qué tal el paro de labores de maestros en al menos 150 escuelas de Acapulco, Guerrero, luego de la serie de amenazas de extorsión para exigirles el cincuenta por ciento del salario y aguinaldo a todos y cada uno, incluidos supervisores y directores de los planteles.
¿Y el gobierno de Angel Aguirre Rivero qué hace? Nada. Y al menos mil quinientos escuincles, sin clases.
El informe de la violencia
Si alguien hubiera dicho que algún día México viviría un informe –que, en realidad es un mensaje- presidencial con un minuto de silencio, con más de cincuenta mil muertos y dominado por el tema crimen organizado — ¿hay desorganizado?- no le hubiera creído.
Pero ayer, en el Museo de Antropología e Historia, Calderón advirtió que la guerra continuará hasta el último día de su mandato e insistió en que no, que no está equivocado y que nadie tiene la razón más que él -¿le suena?- por encima de cualquier deschavetado intelectual izquierdoso o representante de la sociedad civil jipiteco.
El sexenio se ha terminado y se irá tal como empezó: con un presidente que insiste en el combate al crimen y que se dice incomprendido y con decenas de muertos a la lista.
¿Cuál es el balance? ¿Más empleos? No ¿Mejoría financiera y económica? No ¿Menos violencia? No ¿Futuro promisorio?
Calderón dijo que los logros de su gobierno han sido opacados por la violencia. Y pregunto: ¿2.7 millones de mexicanos sin empleo, la gasolina y el gas que suben de precio cada mes –aunque esto “no cause inflación”-, millones de jóvenes sin oportunidades y la amenaza de recesión son como para pensar en los éxitos?
Los ingratos mexicanos no valoramos lo que tenemos. Me cae.
Y como si los casinos como tales fueran la causa de la delincuencia y el crimen, ordenó revisar su operación.
Y ya colgado del movimiento activista de Javier Sicilia, anunció la creación de la Procuraduría Social, que reparará el daño a las víctimas de la violencia. “Va a atender a quienes han sido lastimados y afectados”, señaló.
Pero el momento clave y que muestra la desesperación, el temor y el estado emocional de los mexicanos fue cuando Calderón hizo un reconocimiento a las Fuerzas Armadas y se dio un aplauso que levantó a los más de mil asistentes de sus asientos para enviar ese mensaje de agradecimiento a los que, en estas condiciones inéditas para el país, han obedecido las órdenes de su comandante supremo para enfrentar al narcotráfico y que representan la única esperanza ante la indudable corrupción de las policías.
¡Ah!, por cierto, afirmó que por encima de sus preferencias partidistas está su convicción democrática y que no influirá en el proceso electoral de 2012.
¿Entonces tampoco perfilará a Ernesto Cordero, secretario de Hacienda y Crédito Público, como su candidato en el PAN? Es pregunta.
No es terrorismo
El lunes, el juez español Baltasar Garzón, quien encarceló a los cabecillas de la ETA – Euskadi Ta Askatasuna (País Vasco y Libertad), y el rector de la UNAM, José Narro, así como Diego Valadés, ex procurador del Distrito Federal, y jurista de la máxima casa de estudios, refutaron a Calderón y aseguraron que el ataque al Casino Royale, no es terrorismo, como acusó el presidente.
“En tal caso es un grave crimen, pero no terrorismo, porque no existe un objetivo ideológico”, coincidieron. Y se cayó el teatrito. No hay tal.
Informe de Peña, relevo y Eruviel dará el Grito
Y en el Estado de México, todo está listo para Enrique Peña Nieto dé un mensaje el próximo lunes en el Teatro Morelos de Toluca con motivo de su sexto y último informe de gobierno al filo del mediodía y deje la mesa puesta para que el próximo 15 de septiembre, igualmente al mediodía, se lleve a cabo el relevo con Eruviel Avila Villegas, el nuevo mandatario.
Y sin duda ese día será muy agitado para la prensa, ya que por la noche el primer acto de gobierno de Eruviel será dar el Grito de Independencia y encabezar el desfile del dieciséis.
El Estado de México será la principal de los medios dos días consecutivos: el quince de septiembre por el relevo y el dieciséis porque Peña Nieto se comprometió a que al concluir su mandato anunciará si va por la candidatura del PRI a la Presidencia de México. Habrá nota, sin duda.
Inundaciones y ríos… de cinismo
“La intensidad de la lluvia atípica y la gran cantidad de agua”, es el argumento-pretexto de cada año de las autoridades para justificar las inundaciones en municipios como Tlalnepantla, Atizapán, Tultitlán y Cuautitlán Izcalli.
Cínicamente, el edil priísta de Tlalnepantla, Arturo Ugalde Meneses, dice que continuarán las inundaciones en Valle Dorado y Arboledas y culpa a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) de no abrir las compuertas, pero el titular de ésta, José Luis Luege, revira y asegura que no, que sólo le pasan la bolita, porque los munícipes, no sólo los actuales priístas, sino anteriores, panistas, priístas y perredistas, no han ampliado el drenaje. No tienen… remedio.
Que Josefina va arriba
Las encuestas inducidas o pagadas por el interesado suelen decir lo que éste quiere. Lógico, ¿verdad? La carrera presidencial en el Partido Acción Nacional (PAN) comenzó a esclarecerse desde la semana pasada, cuando Felipe Calderón dio el espaldarazo a Josefina Vázquez Mota, hoy ex presidenta de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados y coordinadora del albiazul, con aquel “suerte, Pina”. Chepina está punto de dejar San Lázaro para lanzarse a la conquista de la candidatura panista y el objetivo paralelo: acabar a Santiago Creel, quien no es bien visto allá por el Metro Constituyentes.
… y el tamaño sí importa
Ser rostro de nada sirvió a Alonso Lujambio, secretario de Educación Pública, bajado del camión de la ruta 2012 por órdenes de Los Pinos el lunes pasado.
Lujambio, quien aseguraba cuando soñaba con la casa blanca de Parque Lira que “el tamaño sí importa” –en alusión a la estatura de los precandidatos panistas y no- y “no vengo a ver si puedo, sino porque puedo veno”, debió acatar la orden “por amor a México”, como le dijera al siguiente día Calderón en el mismo acto en el que pidió a los niños que no panda el cúnico.
Y por cierto, Cordero se reunirá hoy con dos mil panistas defeños en el Grand Forum de Taxqueña para continuar con su misión imposible de levantarse de la lona, al estilo Rocky Balboa o, ya de perdis, Pepe El Toro, para imponerse en la carrera presidencial. Al fin que los rivales se los han ido quitando por orden del referee.
Hermano incómodo y quesero
Fernando Larrazabal y Jonás Larrazabal son hermanos, pero además tienen una historia muuuy larga, precisamente en Oaxaca, de donde es el queso que el segundo dijo vender a los casinos en los que se ve recibiendo pagos en efectivo y a la escondidita de al menos cuatrocientos mil pesos.
Fernando se enredó como los citados quesos y no atinó a decir, siquiera, si su carnal los vende. “¿No ha probado los quesos o, de perdis, una quesadilla?”, le preguntaron. Y no contestó, sino hasta el viernes, cuando dijo que le pusieron un cuatro. Mientras, Jonás está arraigado, enredado y enquesado.
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