Los más de tres millones de nuevos pobres cayeron como balde de agua fría al gobierno del presidente Felipe Calderón, cuando está en la recta final, no tiene un buen candidato para las elecciones de 2012 y asegura que la crisis mundial, agravada por la interna de Estados Unidos, no causará, ahora sí, ni un catarrito.
Y acaso el más preocupado es Ernesto Cordero, secretario de Hacienda y Crédito Público, quien en febrero se atrevió a decir que seis mil pesos alcanzan para todo y, no contento, en junio aventuró que el salario mínimo ha recuperado poder adquisitivo en los últimos diez años -¡qué casualidad, los mismos que ha gobernado el PAN-, porque sus aspiraciones de ser el elegido para la candidatura podrían complicarse aún más.
El aumento de la pobreza en México que el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) dio a conocer ayer lo deja muy mal parado y agrava su pírrico posicionamiento entre el electorado, que poco o nada lo conoce.
Cordero, que esta semana madrugó a sus competidores en el Partido Acción Nacional (PAN) con cargadas de cinco gobernadores y 250 alcaldes, dijo que con seis mil pesos alcanza a los mexicanos -“que son muy exigentes y por eso no ven la recuperación”-, para pagar casa, auto, colegiaturas y casi, casi hasta para casa chica.
El gobierno federal aventó a tres secretarios –Alonso Lujambio, Heriberto Félix y José Angel Córdova- precandidato y ex precandidato del PAN, y cuasi candidato a la gubernatura de Guanajuato, respectivamente, a dar explicaciones.
Ninguno convenció. Acaso los que más desestimaron las cifras fueron Lujambio y Félix. El primero defendió a muerte el programa de becas y hasta dijo que hay mejoría en la educación –¿alguien la percibe?-, mientras el segundo culpó a la crisis internacional de 2008 y descalificó el estudio, ya que “es de principios de 2010 y ya son datos históricos, además de que la metodología y variables han cambiado”. Con razón lo bajaron del camión hacia 2012.
Acaso el mejor librado fue Córdova Villalobos, al basar su discurso en el alcance de servicios médicos, aunque tampoco convenció.
Pero el que no se podía quedar callado fue el mismo Calderón. En la reunión con alcaldes del PAN, justificó los números negativos, los atribuyó a la crisis mundial – sí, aquella que nos iba a causar sólo un catarrito, según Agustín Carstens-, y se dijo dolido y lastimado por los números. Lo único cierto es que 52 millones de mexicanos no tienen ni para mal comer. Esa es la realidad, lo demás es puro choro.
Me gustas mucho, me gustas mucho tú
Nuevamente Elba Esther Gordillo sacudió a los vividores de la política –viven de ella, no es ofensa, ¡eh!-, al asegurar en entrevista con el diario español El País que le gusta Marcelo Ebrard para la Presidencia en 2012.
Al reconocer, es más presumir, que tiene mala fama, la eterna dirigente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), que, por cierto, gana 23 mil 900 pesitos al mes con plazas de maestra y directora, asegura que debe tener cuidado de lo que dice y a qué candidato apoyar, porque puede perjudicarlo.
Con ironía que raya en el cinismo, afirmó: “Que si digo que este país necesita ahora un gran pacto y que el candidato que más me gusta es Marcelo Ebrard, tal vez pueda estar perjudicando al señor.
“Eso es duro. No soy cínica. Lo sé. Sé de mi mala fama… pero, lo crean o no lo crean, mi causa es México”, aseguró.
Como dijo la llamada Maestra en 2006 en torno a Madrazo:
¿Tú le crees a Elba Esther? Yo no.
Y el remate es precioso: “Sí. Sin ninguna duda. Yo amo a Elba. La amo, estoy orgullosa de ella”. Cinismo puro.
El Beso del Diablo
Jesús Zambrano, líder nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), de inmediato ironizó y dijo que Ebrard recibió un auténtico Beso del Diablo, insinuando que lo quemó para 2012.
Ebrard, por su parte, dijo que Elba Esther es de derecha y él de izquierda, pero, cauto, evitó deslindarse con críticas o declaraciones fuertes.
“Por ahora no, ya veremos más adelante”, dijo.
No se hagan bolas, Elba Esther irá con el PRI y con Enrique Peña Nieto en 2012. Ese es un strike cantado.
Y el beso del perdón
¿Qué habrá pasado por la cabeza de Manlio Fabio Beltrones cuando Javier Sicilia lo abrazó, le tomó con las dos manos y le besó en la mejilla derecha?
Al concluir la reunión en Chapultepec, donde el escritor consiguió las disculpas de los coordinadores de diputados y senadores de todos los partidos, excepto del PRI -¿a qué le temen?- y promesas de concretar las reformas, el padre de Juan Francisco Sicilia, ejecutado junto a seis personas en Temixco, Morelos, se dirigió hacia los legisladores para despedirse entre abrazos y besos.
Y tal como lo hizo en el encuentro con el presidente Felipe Calderón, en el mismo sitio, pidió un minuto de silencio por las víctimas de la guerra al crimen y exigió a los legisladores pedir perdón por ser corresponsables.
“En nombre de la corresponsabilidad que tienen en esta guerra, venimos a que pidan perdón a las víctimas”, dijo a la clase política que calificó de corrupta.
“Yo sí quiero pedir perdón por lo que nos toca, por no haber estado a la altura de lo que hoy estamos escuchando”, reviró en primer lugar Arturo Escobar, diputado del Verde, y le siguió Armando Ríos Piter, coordinador del PRD en San Lázaro, “porque no es posible que se viva está situación en el país”.
Por supuesto no podía faltar Josefina Vázquez Mota, coordinadora del PAN en la Cámara de Diputados, quien se sumó a “los perdones que aquí se han pedido”.
Y en un tono de falso arrepentimiento pidió perdón por no estar a la velocidad que los ciudadanos merecen, “porque escudados en el fuero legislativo que los ciudadanos no tienen, en ocasiones se hace acopio de la violencia verbal”.
¡Qué noticia!
Vázquez Mota no tenía otra opción, porque negarse a pedir perdón sería muy negativo para sus sueños de ser la candidata del Partido Acción Nacional (PAN) en las elecciones de 2012.
Tres años al Ponchis
Los tres años de cárcel a Edgar Jiménez Lugo, El Ponchis, sicario del Cártel del Pacífico Sur (CPS), que opera en Morelos, llaman a la reflexión y a pedir una reforma al Código Penal que dé continuidad a las condenas.
Sí, ya sé que habrá quienes me critiquen por lo que voy a decir, pero creo que es un sentir generalizado ante la impunidad: ¿Alguien cree que este sujeto que mató con sangre fría, decapitó, degolló, capó y desolló a sus víctimas puede readaptarse socialmente?
El Ponchis, tendría que cumplir su sentencia en el tribilín –correccional de menores- y, al llegar a la mayoría de edad, ser transferido a un reclusorio para quedarse ahí por el resto de sus días. Ese adolescente, que no niño, está perdido.
Se matan 17 reos
La impune ejecución de diecisiete reos en el Centro de Readaptación Social –¿readaptación?- que en un principio se manejó como intento de fuga y riña es una muestra de la corrupción que ha imperado históricamente en las cárceles no sólo de Chihuahua, sino de todo el país.
Y la guerra mediática entre el secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, y el alcalde Héctor El Teto Murguía y su jefe de la Policía Municipal, Julián Leyzaola, no tardó en aparecer.
Cierto que la labor de Murguía y Leyzaola deja mucho que desear. Es más, ambos deberían retirarse, porque aunque el control de los penales es responsabilidad estatal, Juárez vive al borde de la anarquía. Y la joya que soltó El Teto en entrevista con Ciro Gómez Leyva es impresionante: “En las condiciones actuales, sólo Dios sabe si no volverá a suceder otra matanza”. Efectivamente, sólo Dios sabe.
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