CIUDAD DE MÉXICO, Méx.- El Comisionado Nacional de Seguridad, Renato Sales Heredia, enfatizó que si bien hay muchos retos por delante, el Operativo Escudo-Titán ha arrojado resultados alentadores que indican que se está en el camino correcto en el enfrentamiento con los grupos criminales.
Dejó en claro que el gobierno de la República no ha dejado de trabajar para mejorar las condiciones de seguridad en el país, y seguirá trabajando hasta el último día de la actual administración federal.
En entrevista con Notimex, señaló que el tema de la inseguridad es multidimensional y multifactorial, por lo que no hay “fórmulas mágicas” para resolverla, sino maneras de enfrentarla “mejores que otras”.
Dijo que a partir del inicio del Operativo Escudo-Titán el índice de homicidios disminuyó 96 por ciento en Los Cabos, al pasar de 163 a 6; en La Paz 61.5, al pasar de 130 homicidios a 24; en Colima bajó 61.5, al pasar de 39 a 15 y en Guanajuato descendió 51.4, al pasar de 35 a 17 homicidios.
Explicó que la inseguridad ha repuntado en algunas entidades por diversas causas, entre ellas el cambio en las políticas de salud en Estados Unidos; falta de capacitación en el nuevo sistema de justicia penal; falta de legislación en el mando único y la debilidad de los cuerpos policiales de los municipios, entre otras.
Sobre el primer punto, dijo que prohibir la venta de opiáceos en Estados Unidos generó un rentable mercado negro y es más fácil para muchos grupos criminales vender drogas en ese país y comprar armas de fuego, pues es más fácil comprar “una bazuca” en la Unión Americana que un jarabe para la tos. En una ecuación perversa venden droga y compran armas, enfatizó.
Es muy elemental pero muy cierto que al incrementarse el número de armas en el país, crece el número de delitos y homicidios donde está implicado el uso de éstas, expresó Sales Heredia.
Por ello, dijo, se debe ajustar el nuevo sistema de justicia penal para que amerite prisión preventiva oficiosa la portación de armas de uso exclusivo del Ejército, pues hoy en día, quien es detenido por este delito, puede seguir su proceso en libertad.
Enfatizó que también hay una gran debilidad policial en los municipios, “no se concluyó en las cámaras la propuesta de mando único, no se legisló, no se definió suficientemente el modelo policial que requerimos como país”.
Expuso que hay más de dos mil 400 municipios en el país y sólo mil 800 cuentan con policías. La mayor parte están fragmentadas, son frágiles, el promedio de ingreso de los policías es de cinco mil pesos al mes, y por ello terminan coptados por los grupos de la delincuencia organizada, que se empoderan por la alta rentabilidad en el mercado ilícito de droga, y de combustibles, y compran o corrompen a las policías.
En su opinión, debe recapacitarse en el nuevo sistema de justicia para salir de la “babel procesal en que ahora nos encontramos, ayudar a las policías municipales, dotarlas de sentido de pertenencia, pagarles mejor, dotarlas de prestaciones sí realmente queremos cambiar las cosas en nuestro país”.
También consideró necesario modificar el artículo 123, Apartado B, fracción XIII de la Constitución que discrimina a los operadores del sistema de justicia, no solo a los policías, sino también a los peritos y fiscales. “Yo creo que la ruta es esa, pero también creo que el operativo está funcionando, porque tiene metas muy específicas con la cumplimentación de órdenes de aprehensión”, anotó.