TOLUCA, Méx.- El trabajo de investigación, seguimiento y gabinete desarrollado por personal de la Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM) y la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), permitieron la detención de siete probables responsables que conformaban una red delictiva dedicada al robo de cajeros automatizados de distintas instituciones bancarias.
De acuerdo con la indagatoria número 443230190001311, la aprehensión de Alberto Sebastián Flores González, Francisco Javier Sánchez Pérez, Luis Enrique Soto Cuevas y José Héctor Pérez Contreras, se logró cuando intentaban abrir, con ayuda de un soplete y dos tanques de oxigeno, el área de seguridad de un cajero automático en Tlalnepantla.
A los cuatro probables responsables se les requisó también una camioneta de la marca Mazda color negra con matrícula 238 XWH, misma que se encontraba estacionada frente a una sucursal del la institución BBVA Bancomer sobre el periférico norte en el municipio de Tlalnepanta.
En el lugar también fueron detenidos Oscar Rojas Marín, Adrián Ruiz Ulloa y Erick Navarro Montoya, elementos de la Policía Municipal de Tlalnepantla, quienes trataron de impedir la detención de los cuatro primeros, ofreciendo a cambio un vehículo y sus papeles originales para evitar ser presentados ante el Ministerio Público. Las investigaciones desarrolladas por ambas instituciones, han podido establecer que el modo de operar de la célula delictiva era durante las madrugadas y apoyados por los elementos de la corporación municipal para evitar ser detenidos.
Flores González, Sánchez Pérez, Soto Cuevas y Pérez Contreras, se encuentran vinculados al robo cometido el 6 de julio pasado a un cajero automatizado de la misma institución bancaria que se encontraba en el interior de un Centro Comercial en la Avenida Prolongación Toltecas en la colonia Los Reyes Iztacala en Tlalnepantla.
En esa ocasión, se ha conocido, los probables responsables utilizaron armas de fuego para amagar al vigilante del lugar y someterlo, así como después emplear sopletes para violar las cajas de seguridad del cajero y obtener más de un millón de pesos en efectivo.