CIUDAD DE MÉXICO, Méx.- El Pacto Mundial para la Migración, que actualmente negocia la comunidad internacional, debe tener como prioridad la protección y el bienestar de los menores de edad en tránsito, pidió el Fondo de la Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
En un comunicado, el Unicef pidió a los dirigentes mundiales que se reunirán la próxima semana en Puerto Vallarta, en el estado mexicano de Jalisco, que establezcan que los derechos de los niños desarraigados deben ser los principales compromisos.
La reunión de México, que se llevará a cabo del 4 al 6 de diciembre próximo, es un paso importante hacia la redacción del Pacto Mundial para la Migración, un acuerdo intergubernamental histórico coliderado por un representante mexicano que abarcará todas las dimensiones de la migración internacional.
“Los líderes mundiales y los legisladores reunidos en Puerto Vallarta pueden trabajar juntos para lograr que la migración sea segura para los niños”, expresó el director de programas de Unicef, Ted Chaiban.
Añadió que “es posible, incluso en países con recursos limitados, poner en marcha políticas, servicios e inversiones que apoyen efectivamente a los niños refugiados y migrantes cuando aún se encuentran en sus países de origen, cuando cruzan las fronteras y cuando llegan a sus destinos”.
Los niños refugiados y migrantes son especialmente vulnerables a la xenofobia, el abuso, la explotación sexual y la falta de acceso a los servicios sociales. Es imperativo contar con políticas para protegerlos en el transcurso de su viaje, dice además un informe difundido este jueves por Unicef.
Titulado “Más allá de las fronteras: Cómo lograr que los pactos mundiales sobre migración y refugiados protejan a los niños desarraigados”, el informe incluye ejemplos prácticos que han funcionado para apoyar e integrar a los niños desarraigados y a sus familias.
El informe también presenta el programa de acción de seis puntos de Unicef como base para elaborar políticas que protejan a los niños refugiados y migrantes y garanticen su bienestar.
Entre los puntos, destacan proteger a los niños refugiados y migrantes, especialmente a aquellos no acompañados, contra la explotación y la violencia; poner fin a la detención de menores que buscan refugio; y mantener a las familias migrantes unidas.
Además, incluye recomendaciones sobre cómo ayudar a los niños refugiados y migrantes a permanecer en la escuela y a darles servicios de salud.
El documento subraya además la necesidad de presionar para que se tomen medidas sobre las causas subyacentes de los desplazamientos a gran escala de los refugiados y los migrantes; así como promover medidas para combatir la xenofobia, la discriminación y la marginación.