VALLE DE MÉXICO.- A pesar que la PGJEM ha clausurado más de 700 antros y tugurios en diversos municipios de la entidad, varios establecimientos han reabierto sus puertas sin importar a las autoridades locales los delitos de lenocinio y narcomenudeo de los que les acusó la Procuraduría.
El Procurador General de Justicia del Estado de México, Alfredo Castillo Cervantes, reconoció “de alrededor de 700 lugares que clausuramos, unos 200 aproximadamente obtuvieron un amparo y volvieron a abrir”.
No obstante ello, el procurador mexiquense destacó que seguirá con los operativos en bares, pues hay innumerables quejas de la sociedad por la proliferación de cantinas, bares y tugurios donde se oferta comercio sexual con menores, mujeres extranjeras y se da el narcomenudeo.
Hay que subrayar que de los table dance, antros y bares que presentaron irregularidades y fueron clausurados por la PGJEM, varios presentaron amparos y reabrieron el negocio, un ejemplo de ello es el club Douss, en Tlalnepantla de Baz.
Otro ejemplo son las cantinas aledañas al Santuario El Cerrito, en Cuautitlán México, donde el mismo presbítero Alejandro Torres López, alertó de la proliferación de tugurios en la zona, un ejemplo de ellos, clausurado y reabierto a los pocos días, es la cantina “El Tahúr”.