TOLUCA, Méx.- Las largas jornadas en el campo y la exposición directa a los rayos del sol provocaron cáncer de piel a Juana Flores de 68 años de edad, por lo que especialistas del Centro Médico “Lic. Adolfo López Mateos” le realizaron de manera gratuita una resección del tumor maligno y una reconstrucción nasal con valor de más de 100 mil pesos en un hospital privado.
“Yo no sabía que tenía cáncer, hasta que mi nariz empezó a crecer y vine al doctor. Dicen que ya tenía un avance como de ocho años. Aquí me la reconstruyeron porque por el tumor perdí toda la piel que recubría desde la punta hasta casi la frente del lado derecho. Algo que con mi trabajo en el campo yo no hubiera podido pagar, aquí fue gratuito”, dijo.
El jefe de cirugía plástica de este nosocomio, Fernando Romero, explicó que el tumor no se trató a tiempo y estaba muy avanzado; había invadido el cartílago de la nariz, tomó desde la punta, el dorso, el ala y la columnela, por lo que tuvieron que realizar una reconstrucción con injertos cartilaginosos que tomaron de su oreja.
“La gente cree que es un granito o una manchita y deja pasar el tiempo hasta que eso se convierte en un tumor de tamaño considerable. Una restauración nasal no queda con una sola cirugía, por lo que a esta paciente la hemos intervenido dos veces. En la primera se hizo la remodelación del colgajo y posteriormente un desgrasamiento para afinar un poco más la nariz”, abundó.
El especialista comentó que el carcinoma vasocelular es el tipo de cáncer más común en la piel y ocurre cuando las células crecen sin control; empieza en la epidermis (capa superior de la piel), siendo la exposición a la radiación ultra violeta de la luz solar el factor de riesgo.
“Son tumores que tienen avance lento, pero invasivos. Van destruyendo las estructuras, en este caso en la cara, la nariz, porque son zonas expuestas al sol, al igual que las manos, las orejas, el cuello, entre otros”, señaló.
Fernando Romero aseguró que por lo general este tipo de cáncer no es doloroso y sus signos más comunes son: bultos color rosa o pálidos, cerosos, brillantes, parches rojos y escamosos, llagas abiertas que pueden sangrar y no sanar.
Para evitar esta enfermedad, los médicos recomiendan no exponerse a la luz del sol, sobre todo de las 10 de la mañana a las 2 de la tarde, período en que la luz ultra violeta es más intensa. Usar bloqueador solar, pantallas con factor de protección mínima del 40, aplicándolo cada 8 horas y media hora antes de la exposición. El uso de guantes o camisas de manga larga para evitar los rayos directos a la piel, sombrero que cubra los bordes de las orejas, la parte posterior del cuello, el cuello y la cabeza