TOLUCA, Méx.- Mario reconoció que su dependencia al alcohol y a algunas otras drogas le impedía seguir con su vida y decidió internarse en el Centro Especializado de Prevención y Rehabilitación de Adicciones (CEPRA). Él es uno de los 251 pacientes que ha recibido un tratamiento integral y coordinado con sus familiares para superar las adicciones.
Durante año y medio, especialistas del CEPRA han brindado tratamiento residencial y atención integral de manera gratuita a pacientes, cuyas edades oscilan entre 15 y 59 años, que de manera voluntaria decidieron terminar con la dependencia a diversas substancias a través de terapias médicas, psicológicas, psiquiátricas, nutricionales; además de talleres de valores, lectura bíblica, yoga, meditación activa, escultura en barro y activación física.
La coordinadora del CEPRA, Norma Vallejo Valdés, señaló que el modelo de atención que se brinda en el centro es el Minnesota, que es un esquema internacional que pretende la abstinencia completa, construir una calidad de vida física, mental y emocional en el paciente y conseguir que el adicto y su familia acepten ayuda para desarrollar un ambiente diferente.
“Los internos permanecen aquí durante 35 días y tenemos la capacidad para prestar atención a 24 personas todos los días del año. Tratamos a quienes tienen alguna dependencia bajo esquemas clínicos y terapias psicoterapéuticas, todo el día están ocupados, desde que amanece la meta es que su vida tiene que volver a un orden en lo físico y en lo espiritual. Hay un trabajo coordinado con las familias y ellos los visitan tres veces a la semana para crear posteriormente una sana convivencia en el hogar y en el entorno social”, indicó.
La especialista dijo que los adictos antes de su ingreso consumían diversas sustancias como alcohol, marihuana, inhalables y cocaína, entre otros, por lo que cada caso es multifactorial y por ello el seguimiento médico es especializado. Al término del método clínico aplicado se refieren a los CAPA´s para un post tratamiento y así mantener la abstinencia.
“Este tipo de terapias también representan un ahorro a las familias, pues en una clínica privada llegan a costar hasta 10 mil pesos. El personal de esta institución ha tenido capacitación constante en el Instituto Nacional de Psiquiatría “Ramón de la Fuente Muñiz” y la Universidad Hebraica, son trabajadores dedicados a salvar vidas, familias y a la sociedad en general”, aseveró.
Finalmente, invitó a los padres de familia a estar pendiente de sus hijos para evitar el consumo de drogas legales e ilegales y no hacerlo frente a ellos, porque ellos toman ejemplo de sus mayores.