CIUDAD DE MÉXICO, Méx.- El diputado Ángel Rojas Ángeles (PRI) propuso un programa para construir “azoteas verdes” que mitiguen los graves efectos de la contaminación en el medio ambiente, alentando la participación ciudadana mediante la reducción del 30 por ciento en el pago del impuesto predial a quien las instale.
Al impulsar un punto de acuerdo en este sentido, destacó la importancia de que los congresos locales evalúen la posibilidad de establecer adecuaciones fiscales que permitan obtener ese beneficio.
El integrante de la Comisión de Desarrollo Urbano y Ordenamiento Territorial convocó a todos los gobiernos locales para que implementen acciones que promuevan, inviten, capaciten y proporcionen los insumos para que los ciudadanos instalen en su hogares “azoteas verdes”, conforme a su normatividad, facultades, atribuciones y posibilidades.
Precisó que es urgente invertir en estrategias para reducir los riesgos ambientales en las ciudades, ya que los efectos de la contaminación en el medio ambiente provocan en México la muerte de 22 mil personas cada año, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS). Guadalajara, Ciudad de México y Monterrey son las urbes que registran los niveles más altos de contaminación en América Latina.
Rojas Ángeles explicó que las “azoteas verdes” pueden instalarse a través de la siembra en plataformas o en macetas, con plantas de ornato o huertos familiares, los cuales pueden utilizarse para consumo familiar o venta en apoyo a su economía.
La siembra de plantas de forma masiva contribuirá a capturar partículas suspendidas en el aire; absorbería hasta en 80 por ciento la lluvia, reduciendo problemas de inundación; sería un aislante de ruidos; se protegerían los edificios de los rayos UV, y se disminuiría la temperatura interior de los inmuebles en alrededor de tres grados centígrados, lo que ayudaría a disminuir el costo de la energía eléctrica por el uso de aire acondicionado o sistemas de refrigeración, explicó.
Entre otras ventajas, se propicia un ahorro en el mantenimiento de las casas debido a que ya no se vuelve a impermeabilizar la azotea aproximadamente durante 40 años de vida útil de la naturación (tratamiento técnico con vegetación); incrementa la plusvalía del inmueble entre 6 y 15 por ciento, y mejora la estética y el entorno urbano lo que reduce el estrés, presión arterial y muscular de las personas, por lo que mejora su calidad de vida.
El legislador por Querétaro apuntó que el camino hacia el desarrollo sustentable requiere de una integración efectiva entre políticas económicas y ambientales que incluya la adecuación de la normatividad fiscal, para alentar las ventajas que proporcionan los subsidios o “privilegios verdes”, considerados como estímulos directos.
Las “azoteas verdes” ya se han instalado en varios países y han arrojado beneficios sociales, ambientales, ecológicos y económicos, por lo que debe aplicarse en las urbes mexicanas un programa de esta índole, con el propósito de concientizar a los ciudadanos y alentar su participación para frenar los efectos del cambio climático.
Refirió que la OMS, en su segundo informe presentado en Ginebra, Suiza, en octubre de 2015, advierte amenazas a causa de los efectos del cambio climático, como la contaminación del agua, aire y suelo; exposición a sustancias químicas; radiación ultravioleta y factor en más de 100 enfermedades, entre ellas, el cáncer y los problemas en el sistema nervioso, cardiovasculares, nacimientos prematuros, retraso en el crecimiento intrauterino, bajo peso al nacer, síndrome de muerte temprana y mortalidad infantil, que contribuye a casi 3.4 millones de muertes prematuras en todo el mundo.
Por ese motivo, ese organismo internacional ha alertado sobre el grave deterioro de la calidad del aire en la mayoría de las zonas urbanas de todo el planeta que “está matando a millones y colapsando los sistemas sanitarios”, convirtiendo a la contaminación ambiental en las grandes metrópolis en un “problema y emergencia de salud mundial”, principalmente por las emisiones del tráfico vehicular y de las centrales térmicas de combustibles fósiles (polvo de las construcciones y la madera quemada en las casas, como factores decisivos en los países emergentes), concluyó.