CIUDAD DE MÉXICO, Méx.- La reubicación de internos del Penal del Topo Chico al Cefereso número 18 de Ramos Arizpe, Coahuila, se realizó sin incidentes, aunque generó zozobra, malestar y llanto de familiares de los reos.
Hasta las afueras del reclusorio, localizado al noroeste de Monterrey, decenas de personas, en su mayoría mujeres, se apostaron desde la madrugada, luego de enterarse del operativo de traslado, para conocer la situación de sus hijos, esposos, hermanos, entre otros, que purgan penas por delitos diversos del fueron común y federal.