LOS ÁNGELES.- Activistas defensores de inmigrantes en Estados Unidos dieron a conocer hoy la segunda muerte de un inmigrante registrada en menos de tres semanas en el centro de detencion de Adelanto, California.
Los grupos exigieron rendición de cuentas y transparencia a las autoridades y reclamaron una investigación inmediata de la muerte de Sergio Alonso López, de 55 años, quien falleció el jueves pasado cuando estaba bajo custodia de la Agencia de Inmigracion y Aduanas (USICE por sus siglas en inglés).
Esta es la segunda muerte ocurrida en Adelanto este año, luego del fallecimiento de Osmar Epifanio González-Gadba hace menos de tres semanas. “Es espantoso que esta sea la segunda muerte que ocurra en Adelanto en las últimas tres semanas”, dijo Christina Fialho, cofundadora y directora ejecutiva de CIVIC, quien reportó que el centro es conocido por su pésima atención médica, y que desde febrero han aumentado las quejas por esta razón.
El centro de detención de Adelanto es operado por The GEO Group Inc., una compañía privada con un historial documentado de abusos, mala administración y negligencia, y desde su apertura hace cinco años, se han reportado cinco decesos en sus instalaciones.
El fallecimiento de López hizo que la cifra total de muertes que involucran al ICE lleguara a 170 desde 2003, agregó Fialho, quien consideró que “es un expediente vergonzoso exponiendo aún más la incapacidad de ICE para garantizar la seguridad y la salud de las personas bajo su custodia”.
“El centro de detención de Adelanto ejemplifica los abusos sistemáticos encontrados en los centros de detención de todo el país”, dijo a su vez Javier Hernández, director de la Coalición Inland para la Justicia Inmigrante.
A menudo se “habla de la negligencia médica en esta instalación”, cuyas autoridades ignoran los pedidos de atención, expuso por su parte Marcela Hernández, de La Coalición de Jóvenes de Inmigrantes.
Los decesos en Adelanto ocurren mientras el Congreso analiza la solicitud del presidente estadunidense Donald Trump de tres mil millones en fondos adicionales para aumentar el número de personas encerradas en centros de detención y expandir la fuerza de deportación. “Estamos indignados por el desprecio por la vida humana y la negativa de ICE a satisfacer las demandas de transparencia”, manifestó Gabriela Benítez, organizadora de Detention Watch Network.