TULTITLÁN, Méx.- La desaparición del activista Cándido Chávez Gómez, de 45 años de edad, integrante del “Movimiento Popular Juárez” en esta localidad fue a todas luces un secuestro político, por lo que los activistas exigen a las autoridades el esclarecimiento del hecho y tomar medidas para que no se repitan actos de represión contra esta organización.
Así lo denunció José Rogelio Gallegos, coordinador de dicho movimiento que opera en Tultitlán, quien destacó que la organización ha padecido intentos de represión debido a su labor social de denuncia pública por diversos problemas que enfrenta la sociedad, sin embargo descartó tener claro de dónde provienen las amenazas y atentados contra la organización, incluido el secuestro de Cándido Chávez.
Tras dar a conocer que Cándido Chávez Gómez, ya apareció ileso, después de permanecer secuestrado por tres meses, ahora existe mucho temor en la organización y el afectado, debido a las amenazas que han recibido por lo que exigen a la Procuraduría de Justicia mexiquense dé seguimiento a la denuncia del secuestro, asentada en la carpeta de investigación número 493510830283211, esclarezca los hechos y sancione a los responsables.
“Tenemos miedo, claro que hay temor, pero no dejaremos de denunciar las arbitrariedades que cometen las autoridades, o los problemas que enfrenta la sociedad de Tultitlán, sin embargo, sí le exigimos a la autoridad que nos proteja, que no quede impune el secuestro de nuestro compañero”, acotó José Rogelio Gallegos.Cabe recordar que el pasado 19 de agosto, alrededor de las 20:30 horas desapareció Cándido Chávez Gómez, de 45 años de edad, cuando al parecer sujetos ingresaron a su domicilio, pero el acoso a la organización ya inició días atrás, cuando el día 8 de agosto fue dejado un sobre en el local que les prestan para sus juntas, ubicado en la calle Higuera, de la citada colonia, el cual contenía la leyenda: “Atente a las consecuencias, muy pronto a ver si vas a ser supermán”, pues días antes los activistas habían denunciado las irregularidades que se cometen en el tiradero de basura que opera la empresa Tecnosilatos y que está afectando el medio ambiente y la salud de la población.